After, una saga que divide a sus lectores entre los que la odian y los que la aman. Yo formo parte de este último grupo, pero con matices. He de confesar que soy fan de las historias del típico bad boy rompe corazones que se enamora y cambia, pero eso no significa que admire la forma en cómo se trata las relaciones tóxicas en estas historias tan de moda. Por un lado tenemos a Tessa, la típica chica empollona, virgen y que lo tiene todo planificado en su vida, y por el otro, a Hardin, un guaperas de universidad, popular y que se lleva a las chicas de calle. Pero no todas caerán rendidas a sus encantos y es que cuando Tessa se cruza en su camino, no está claro quién pone patas arriba el mundo del otro. En un principio no pueden ni verse, pero poco a poco va surgiendo una inevitable atracción que les hará replantearse toda su existencia. Una historia de amor que no deja indiferente a nadie, ya sea para bien o para mal. A veces tienes la necesidad de gritarle a Tessa que espabile y otras, de darle una bofetada a Hardin. A parte de esto, es una lectura bastante ligera a pesar de sus 570 páginas. Yo me lo leí en un par de días el primer libro porque prácticamente me enganché. Los personajes secundarios también tienen peso en la historia y eso me gusta, porque no se les deja olvidados y consiguen atraparte y querer saber más de ellos, por qué son como son, porqué dicen o hacen algunas cosas. Y es que, sin querer hacer spoilers, admito que el final de la historia no me la imaginé para nada así. Es retorcida, cruel, eso y muchos adjetivos más, pero es todo eso lo que consigue que quieras leerte su continuación para saber qué ocurre. Sin dar muchos detalles y habiendo leído varías veces la saga, noté una evolución en la madurez de la autora, en cómo intenta redimirse de alguna forma y poner remedio a ese primer libro que desde luego, causó revuelo. al menos yo vi esa evolución, y me gustó bastante.
Como punto y final, diré que dónde unos ven un libro que debe ser quemado en la hoguera porque es evidente que la relación de Hardin y Tessa no es sana, yo veo una forma de enseñar cómo no deben ser las relaciones, ya que por desgracia, en muchas ocasiones la ficción supera a la realidad.
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