Lo Poco Que sabemos de Tamara Ireland Stone
Me siento despierta. Tengo miedo de seguir abriendo puertas, pero tengo tanta curiosidad por descubrir qué hay detrás de ellas. Y ahora sé demasiado. No puedo regresar. No quiero hacerlo
|
Lo Poco Que sabemos de Tamara Ireland Stone
Me siento despierta. Tengo miedo de seguir abriendo puertas, pero tengo tanta curiosidad por descubrir qué hay detrás de ellas. Y ahora sé demasiado. No puedo regresar. No quiero hacerlo
|
Lo Poco Que sabemos de Tamara Ireland Stone
Es sobre estar vivo. Sobre darse cuenta de todas las cosas pequeñas porque nadie sabe jamás si es la última vez que las verá
|
Lo Poco Que sabemos de Tamara Ireland Stone
Creo que el mundo sería un lugar mejor si las personas pararan de tanto en tanto y se cuestionaran todo lo que creían que sabían
|
Lo Poco Que sabemos de Tamara Ireland Stone
Siempre me ha fascinado lo que otras personas creen o el hecho de que no crean en absolutamente nada. ¿A ti te ocurre lo mismo?
|
Lo Poco Que sabemos de Tamara Ireland Stone
Pero no importa cuánto tiempo dos personas se hayan conocido o cuántas veces hayan dicho esas palabras, hay ciertas cosas que piensas, pero nunca debes decirle a tu mejor amiga
|
Lo Poco Que sabemos de Tamara Ireland Stone
Creo que el mundo sería un lugar mejor si las personas pararan de tanto en tanto y se cuestionaran todo lo que creían que sabían.
|
Lo Poco Que sabemos de Tamara Ireland Stone
-Diablos, no lo sé -contestó- ¿Quién lo sabe? Tu no lo sabes. Yo no lo sé. Solo estoy feliz por estar vivo. Siempre fui de la idea de que hay que vivir el momento, pero ahora lo soy aún más. El mundo parece distinto. Los colores son más brillantes, la comida es más rica y el aire huele más limpio. Incluso en los Ángeles. -hablaba más rápido, comos i hubiera terminado ese café y comido una barrita de chocolate y luego tomado un Red Bull-. Estoy enamorado de una chica increíble que se llama Emory y aún nos quedan cuatro meses más juntos, hasta que nos vayamos a distintas universidades, así que esta noche llegaré a casa y despertaré mañana y voy a disfrutar cada segundo que tengo con ella. Si algo me ha enseñado esta experiencia es a aprovechar cada segundo de cada día, porque nunca sabes cuando se terminará. No tengo miedo de lo que ocurrió después. Sinceramente, no me importa. Solo estoy muy contento de estar aquí.
|
El tiempo entre nosotros de Tamara Ireland Stone
En lo más hondo de su beso late una nueva promesa sobre nuestro futuro, pero en la superficie, lo único que cosquillea y estimula cada una de mis terminales nerviosas es la intensidad de nuestro presente
|
Hasta la última palabra de Tamara Ireland Stone
Las crisis de ansiedad son como terremotos. Siempre me siento aliviada cuando la tierra deja de temblar, pero sé que más adelante habrá otra, y otra más. Nunca las veo venir.
|
Hasta la última palabra de Tamara Ireland Stone
-Todo el mundo tiene algo- afirma. -¿Tú crees? -Claro que sí. Simplemente hay personas con mejores dotes de interpretación que otras.- |
El tiempo entre nosotros de Tamara Ireland Stone
Pero las dudas se borran de mi mente ora vez cuando él se inclina hacia delante y desliza lentamente el pulgar por el contorno de mi mandíbula hasta el mentón. Cierro los ojos mientras desplaza el dedo hacia mi boca y me roza el labio inferior, y noto que me acerco, como atraída por el campo gravitatorio que lo rodea. Hace ademán de besarme, y yo cierro los ojos de nuevo e inspiro brevemente, esperando el contacto de sus labios. Pero el beso nunca llega. En vez de ello, noto que se detiene. Su aliento me acaricia la mejilla, y la palabra “perdón” me llena el oído en un susurro. —¿Por qué? —murmuro. —Por esto —suspira—. Lo siento. No puedo… |
El tiempo entre nosotros de Tamara Ireland Stone
—Anna, lo siento mucho. He estado intentado reunirme contigo desde que… —Al parecer empieza a digerir la situación. —¿Qué? ¿Desde cuándo? —Anna escúchame. Esto es importante. Brooke está en casa. Comunícale… es decir, comunícame a mi… que Brooke está en casa. Y pídeme que te enseñe… —Pero antes de que pueda decir una palabra más, se desvanece. —¿Qué? —imploro—. ¿Qué me enseñes qué? —Pero estoy hablándole a un espacio vacío mientras me pregunto desde qué lugar y qué momento ha venido, y qué se supone que debe enseñarme. |
Gregorio Samsa es un ...