La niña de Libisosa de Elena Fuentes Moreno
Al final todos tendremos que rendir cuentas de nuestros actos, de un modo u otro.
|
La niña de Libisosa de Elena Fuentes Moreno
Al final todos tendremos que rendir cuentas de nuestros actos, de un modo u otro.
|
La niña de Libisosa de Elena Fuentes Moreno
—Horatius Praetextatus, la felicidad para los de mi clase no existe, hace mucho tiempo se extinguió esa posibilidad en mi destino y lo mejor que puedo hacer es tomar conciencia de ello.
|
La niña de Libisosa de Elena Fuentes Moreno
Aquel lugar era el más sagrado para él, allí acudía siempre que regresaba a su hogar y donde iba a hacer una ofrenda siempre que partía. Aquel templo le transmitía una intensa paz, con la ciudad a sus pies y el mar en el horizonte. En el sacellum de la diosa Atargatis encontraba la redención, allí se despojaba de su piel de soldado y era un simple hombre al que la diosa perdonaba, era el único lugar donde las almas que había asesinado no podían darle caza.
|
La niña de Libisosa de Elena Fuentes Moreno
...había aprendido que en la vida nunca puedes dar nada por sentado, en cualquier momento tus planes quedan truncados, así que lo mejor era intentar hacer bien su trabajo y pasar lo más desapercibida posible para no tener problemas.
|
La niña de Libisosa de Elena Fuentes Moreno
Aquel cerro, al lado del cementerio del pueblo, escondía restos de una ciudad ibera: Libisosa, una población oretana ubicada en un punto neurálgico para el comercio y rica en recursos agrícolas y ganaderos. Bajo aquel montículo, agreste y árido, se ocultaban restos íberos, romanos y medievales, que habían permanecido siglos soterrados, sin que nadie lo hubiera ni tan siquiera sospechado durante muchos años.
|
Anacronía de una marquesa de Elena Fuentes Moreno
Desde aquel momento, yo solo sería fiel a una persona: Margarita Ruiz de Lihory, marquesa de Villasante, desde el fallecimiento de mi madre, y baronesa de Alcahalí.
|
Anacronía de una marquesa de Elena Fuentes Moreno
...como suelo decir: para que hablen mal de otra, que lo hagan de mí, que me es indiferente.
|
Anacronía de una marquesa de Elena Fuentes Moreno
Tetuán fue una ciudad fundamental en la época islámica. Era el enlace entre Marruecos y Andalucía. Allá donde mire, puede usted ver influencias andalusíes. Después de la Reconquista, la ciudad fue reconstruida por los refugiados musulmanes provenientes de Al-Andalus, que habían sido expulsados por Felipe III -me explicó Luis Antonio, en uno de nuestros paseos por la medina.
|
Anacronía de una marquesa de Elena Fuentes Moreno
A estas alturas, se preguntará por qué le cuento todo esto. Verá, puede que ahora no lo entienda, ni siquiera en años, pero algún día lo hará, es vital para comprender lo que hice después; son las historias que componen mi vida y me han hecho como soy. Todas influyeron en algo, me cambiaron.
|
Anacronía de una marquesa de Elena Fuentes Moreno
Una mujer podrá ser doncella veleidosa o esposa tibia, pero no puede ser mala madre ni abandonar a sus hijos, porque todas viven por y para ellos, lo contrario sería una conducta monstruosa. Este incumplimiento no alcanza al hombre, por la confianza ilimitada que le merece su esposa.
|
Anacronía de una marquesa de Elena Fuentes Moreno
Margarita aspiró profundamente, como si intentara reunir toda la energía posible para continuar, miró un segundo al techo, bebió un poco de agua y comenzó a hablar. Esta es su historia.
|
Anacronía de una marquesa de Elena Fuentes Moreno
Esos días, en la calle, se me ha juzgado y condenado sin escucharme, no caiga usted en el mismo error. No voy a pedir nunca disculpas porque nací en una familia acomodada y haber sido hermosa e inteligente, todo eso me ha reportado muchas satisfacciones, pero también un sinfín de obstáculos, que me he esforzado siempre por superar. Sé que he provocado celos, envidias y rencores, soy consciente, pero no merezco esto. Es usted todavía muy joven para haberlo aprendido por experiencia propia, pero, en la vida, todo depende del punto de vista personal, el lugar y el momento en el que se juzga una situación o hecho.
|
Anacronía de una marquesa de Elena Fuentes Moreno
Tenía esa fragilidad enternecedora que inspiran los ancianos, que se quebró inmediatamente cuando comenzó a hablar, revelando su espíritu imponente. Era una de esas personas que te dejan claro, con tan solo una mirada, quién manda.
|
Anacronía de una marquesa de Elena Fuentes Moreno
Aquel caso consumió a España de morbo, nadie escapó a la tentación de escandalizarse y reflexionar sobre él. Como suele suceder, las informaciones se tergiversaban y pasaban de boca en boca, generando una historia más sorprendente, si cabe, que la real.
|
Anacronía de una marquesa de Elena Fuentes Moreno
La vida es un sendero donde, tras cada paso, se abren nuevas posibilidades, múltiples, en realidad. Ante tus pies, se inician caminos que te llevarán a la mejor versión de ti mismo o a la peor, y entre ellas, hay cientos de versiones intermedias, en una sola existencia... tú decides. Eso lo sé ahora, cuando conocí a Margarita, no.
|
Cual es el nombre completo de Dumbeldore?