Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
Debería haber previsto este cambio, por las dificultades que de un tiempo a esta parte hallo para todo. El amor no pone tantos obstáculos
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
Debería haber previsto este cambio, por las dificultades que de un tiempo a esta parte hallo para todo. El amor no pone tantos obstáculos
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
¡Pueda yo un día vengarme en sus brazos del despecho involuntario que me causó la felicidad del caballero!
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
No crea que la ultrajo con una criminal esperanza. Seré desgraciado, ya lo sé; mas los sufrimientos me serán queridos: me probarán el exceso de mi amor; a sus pies, en su seno, depositaré mis penas eternas
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
Poseerla y perderla es comprar un momento de felicidad a cambio de una eternidad de lamentaciones
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
Mientras que usted, manejando con destreza las armas de su sexo, triunfaba mediante la astucia, yo, devolviendo al hombre sus derechos imprescriptibles, subyugué mediante la autoridad.
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
La humanidad no es perfecta ni en el bien ni en el mal. El malvado tiene sus virtudes, así como el hombre honesto tiene sus debilidades.
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
El malvado suele tener sus virtudes, como el hombre de bien sus debilidades.
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
¿Ha olvidado que el amor es como la medicina, solamente el arte de ayudar a la naturaleza?
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
No hemos de permitirnos el exceso sino con las personas a las que queremos abandonar enseguida
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
A su edad, ¡a qué mujer no adora uno, al menos los ocho primeros días!
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
El hombre goza con la felicidad que siente, y la mujer con la que proporciona
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
Huyamos de esta pasión funesta (el amor) que no deja otra elección sino la vergüenza o la desgracia, y que incluso suele unir ambas cosas
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
¡Y verme obligado a tragarme mi rencor! ¡No poder mostrar sino un tierno dolor, cuando tengo el corazón lleno de rabia!
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
El momento más bello de una mujer, el único en el que puede provocar esa embriaguez del alma, de la que siempre se habla y que tan raramente se siente, es aquél en el que, seguros de su amor, no lo estamos de sus favores
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
Puesto que la edad de esta maldita mujer la pone a cubierto de mis golpes, es preciso golpearla en el objeto de su afecto
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
Sin ingenio ni agudeza, tiene, sin embargo, cierta falsedad natural
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
La he visto; la tranquilidad ha huido lejos de kí, y mi felicidad es incierta
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Las amistades peligrosas de Choderlos de Laclos
Aún más falso y peligroso que amable y seductor, nunca, desde su más tierna juventud, dio un paso ni dijo una palabra sin tener un proyecto, y nunca tuvo un proyecto que no fuera innoble o criminal
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Gregorio Samsa es un ...