Yo no soy ambiciosa, no pido grandes cosas... mi ideal sería trabajar tranquila, y no carecer nunca de pan, y contar con un agujero un poco limpio para dormir, con lo más necesario: una cama, una mesa, dos sillas... ¡Ah! quisiera, además, poder educar a mis hijos hacerlos hombres de bien, si eso fuera posible... También tengo otro ideal: no ser golpeada si volviera unirme a otro hombre; no, no me gustaría que me sacudieron el polvo... y eso es todo, créamelo, eso es todo...
Si se puede, por último, tener el deseo de morir una en su cama... después de haber correteado toda una vida moriría satisfecha en mi cama y en mi casa.