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En este libro conoceremos a Kira, que está empezando de nuevo junto a su padre y sus hermanas en un pequeño pueblo, tiempo después de haber perdido a su madre. Ya nada es lo mismo, pero intenta salir adelante con todo de la mejor forma posible y con un poco de ayuda de su nuevo vecino, Matthew, el quarterback del equipo de fútbol americano del instituto, cuyo mundo se pondrá patas arriba al conocerla. Quizá es una historia demasiado juvenil para mí, pero de todas formas la he disfrutado UN MONTÓN. A mi yo adolestente le hubiese fascinado este libro. Me ha encantado conocer la historia de estos dos, cómo sus tira y afloja los llevan a conocerse más entre ellos, cómo comparten bromas, su complicidad, la relación que ambos tienen con sus respectivos hermanos y amigos, descubrir poco a poco sus secretos… Ha sido super tierno, muy entretenido y os puedo asegurar que se lee solo. La única objeción que tengo es mínima, y es que en alguna ocasión las cosas han sucedido demasiado rápido. Los personajes son taaaan tiernos. Kira, que es sarcástica, algo temerosa, inteligente y con un corazón muy noble; y Matthew, con un punto egocéntrico bastante atractivo, divertido, pícaro y cariñoso. Por separado me han maravillado, pero juntos son pura química, complicidad y, sobre todo, amor. Los he adorado. Y no me olvido de todos los personajes secundarios, que son muchos, que le dan un toque superespecial a la historia y a las vidas de nuestros protagonistas. La pluma de Camila me ha encantado. Ya os digo que escribe de una forma tan ligera, que el libro se lee solo. Además, tiene unos toques cálidos que hacen que se te encoja el corazón. En resumen, “Mi refugio a la vera del mar” es un libro muy bonito lleno de personajes que te van a ablandar el corazón; un libro lleno de tira y aflojas, complicidad, familia y mucho amor del bueno. Os lo recomiendo mucho si queréis una historia juvenil y ligera. + Leer más |