El valle de los arcángeles

Nada envejece más que la pérdida de ilusión, por eso es importante buscarla, porque no siempre viene a ti regalada. Todos tenemos algo que nos motiva, aunque no lo sepamos.

Nunca sabemos lo que hay a la vuelta de la esquina. Vaya paso a paso y en poco tiempo, al girarse, descubrirá que ha subido una montaña.

Nunca esperes a que la vida deje de ser dura para decidir ser feliz.

Hay que luchar cada día para ser feliz aunque este maravilloso mundo nos lo ponga muchas veces difícil.

Si estás sumido en un dolor físico o anímico extremo, estás triste todo el rato, porque no hay felicidad que pueda competir con eso, pero si no es así, siempre hay algún motivo para sonreír a lo largo del día, aunque sea solo un poco.

El éxito en la vida es ir de fracaso en fracaso sin perder el entusiasmo.

La felicidad es cuando lo que piensas, lo que dices y lo que haces están en armonía.

La cobardía deja muchos finales y pocas historias. La gente cobarde nunca toca el fracaso, pero tampoco la gloria. Equivócate, pero actúa.

La vida son momentos. Y cortos. Hay que asumirla como tal.