 |
. Estamos en un futuro distópico donde ni la muerte natural ni por accidente existe, las heridas se curan enseguida y se puede reiniciar el contador para volver a ser joven. Pero la gente tiene que morir, para tener un equilibrio, asique se designan Segadores para Cribar, que es como llaman al asesinato, después de pasar pruebas. El primer «requisito» es no querer ser Segador, lo que garantizará que será compasivo. Citra y Rowan son elegidos para el entrenamiento, pero solo elegirán a uno de los dos, y quizá pierdan su humanidad por el camino. Me ha encantado. Quería esperar a que estuviera la trilogía terminada peeero no me he podido resistir. No puedo decir mucho sin hacer spoiler, porque tiene mucha miga, pero al igual que Sed, nos hace reflexionar sobre qué haríamos si nos faltara algo vital, en este caso la muerte. No es todo fácil y sencillo, es como si fuéramos inmortales porque nos pueden revivir, pero está el miedo de que llegue un Segador por sorpresa y te cribe, así que el miedo sigue ahí pero de otra manera. Además habla de lo que estarías dispuesto a hacer por tus seres queridos, si tendrías sangre fría para arrebatarle la vida a alguien solo porque «le ha tocado» o si terminarías cogiéndole el gustillo... Hay buenos, hay malos, hay amor, hay tristeza, argucias, orgullo y dolor, pero sobre todo mucha intriga que te lleva a pasar la página una y otra vez, poniéndote en la piel de los protas y madurando con ellos. Es sencillamente genial, deseando ponerme con Nimbo que es la continuación. |
>
