Cuestión de segundos

Judith ha logrado rehacer su vida en la medida de lo posible tras sufrir un terrible percance. Su futuro marido la dejó plantada en el altar y la atropelló un coche todo con segundos de diferencia. A partir de ahí, ha intentado salir adelante, pero todo por lo que ha pasado no deja de aflorar a su mente una, otra y otra vez así que no se cree capaz de tener una relación normal con nadie más.
Héctor vive para su trabajo. Lleva una gran carga sobre sus hombros que su hermano Hugo no está dispuesto a compartir así que apenas sale ni tiene relación con nadie más hasta que conoce a Judith de manera algo sorpresiva así que los dos chocarán en bastantes ocasiones en las que saltarán chispas.
El libro está narrado desde los puntos de vista de los protagonistas y, además, está ambientado en diferentes momentos viviendo tanto el pasado como el presente para aclarar mejor cómo es el punto en el que se encuentran ambos.
Judith tiene miedo cerval a que la hieran o a hacer daño a alguien y eso lleva condicionando su vida desde hace algunos años. Héctor también ha sufrido pero está dispuesto a arriesgarse, a querer y a enamorarse de alguien que llene sus días. No estarán solos porque Judith cuenta con su familia y su amiga Fernanda y Héctor también tiene a su familia que, a veces, parecen más enemigos suyos que gente que le desea algún bien.
Es una trama llena de sentimientos, no solo de romanticismo, y conoceremos bastante bien a los protagonistas y todo por lo que han pasado así como la evolución que van teniendo al conocerse, sobre todo la de Judith, que va "asomando la patita" poco a poco con la intención de esconderla si nota algo raro.
También se pone en valor la amistad, como esta es capaz de aguantar contra viento y marea y lo importante que es contar con una buena amiga cuando todo se viene abajo, pero también cuando empieza a salir el sol.
Está narrado con gran sensibilidad, haciéndote sentir el dolor de la vida y los recuerdos de Judith así como de las dificultades por las que pasa Héctor en algunos momentos con algunas personas cercanas, pero también como poco a poco van viendo la luz al final del largo túnel del sufrimiento y el dolor. A mi me ha encantado; no te lo pierdas.