Comenzamos esta lectura con un prólogo narrado por una nieta en la que se nos anuncia la muerte de la Abuela, que ha sido como una madre para ella, sus cimientos; de hecho la han criado prácticamente su yaya y su yayo. Ella y su pequeña hija acompañan al yayo en esta noche en la que ya no están junto a la abuela Rita, y bailan, que es algo que llevan haciendo toda la vida y recuerdan los buenos momentos vividos con alegría, porque la abuela no querría verlos destrozados y compungidos. La nieta recibe como herencia de la abuela su preciosa cómoda de colores, algo que siempre estuvo en la casa familiar, que la tenía hechizada de pequeña cuando la descubrió a los 4 años y junto a sus primos intentó investigar su contenido, algo que les fue vetado siempre. Ahora será el momento de descubrir. A partir de que, esa misma noche, la nieta decida abrir la cómoda que su abuela preparó para ella haciendo que Tío Roberto la arreglara y repintara los cajones con los colores del arcoiris, empieza la historia de Rita, la yaya, La Abuela, contada de primera mano por ella, y el lector comenzará un viaje acompañando a esa mujer y muchas más a lo largo de sus vidas. Aquí es cuando empiezan las emociones de verdad y el lector se preparará para acoger a Rita en lo más hondo de su corazón. Cada capítulo corresponde a uno de los cajones de esta cómoda tan especial y esconderá dentro un objeto que contará una parte de la vida de Rita y los suyos, una medalla de bautizo, un pañuelo azul, un saquito de semillas o un cuaderno de poemas. Objetos en principio banales, esconden detrás de ellos tantas emociones, sentimientos, sufrimientos que nos parecerá increíble. Muchas veces tenemos objetos que tienen un inestimable valor sentimental, a mí me pasa (vale que soy de síndrome de Diógenes fácil), pero es que yo veo un diario, unos papeles antiguos, un muñequito y puedo revivir inmediatamente momentos preciosos de mi vida, o me recuerdan momentos malos y que tuve la fuerza para superarlos. Ese es el mensaje que pienso que encierra esta novela, y con esta premisa la autora nos narra y hace un gran homenaje a sus antepasados, ya que tres de sus abuelos tuvieron que huir de la Guerra Civil. Eso es precisamente lo que le ocurrió a Rita, sus padres eran repúblicanos y decidieron salvar a sus hijas de una muerte segura y las enviaron a Francia con un tío que no las acogió en su casa pero les buscó un edificio de emigrantes donde las niñas se pudieran integrar, buscar un oficio y estar protegidas de lo que estaba pasando en el país vecino. al principio son tratadas como "de fuera" por las gentes de allí, pero finalmente todos se integran y forman en el edificio una gran familia. Las tres hermanas (Leonor, Rita y Carmen), son un gran ejemplo, con algunos altibajos por la excesiva responsabilidad de Leonor, porque Rita es muy impulsiva, porque Carmen es la pequeña y le intentan tapar las desgracias, son el amor de hermanas personificado. Me ha gustado muchísimo que pese a las cosas de unas y otras, no se abandonen entre ellas, se perdonen aunque peguen la espantada y estén ahí para cuidarse y cuidar de las demás de la cuadrilla cuando haga falta. Narrada en primera persona, lo que hace que el relato conecte mucho más con el lector, Rita nos hablará de esos primeros años (llega con 10) y como en un momento dado tiene la necesidad de escapar, y elige irse a Narbona, empezar de nuevo, construirse una máscara y un personaje para que no la tachen de españolita. Con una facilidad impresionante para los idiomas, pronto todo el mundo cree que es otra francesa más. A todo el mundo engaña menos a Rafael, también español, su gran amor. Cajón tras cajón de la cómoda, esta mujer nos va relatando sus momentos de más felicidad y gozo, pero también sus penurias, sus pérdidas, hay varios momentos en los que no te puedes creer que haya sido capaz de salir adelante, como ha sacado esas fuerzas, ese nervio, porque parece imposible. Lo he pasado muy mal en algunos momentos, con un nudo en la garganta que me impedía seguir leyendo. Tenía que hacer un descanso, porque al final te metes tanto en la piel de Rita que te afecta. Pero, aún así, vuelve otra vez a levantarse, a recuperar el abrazo de los suyos, de las otras mujeres que la rodean, mujeres que la levantarán y la harán sonreir de nuevo y ver que cuando pasa algo así siempre queda alguien por quien seguir luchando pese a que el sufrimiento no se vaya, no nos abandone el alma. Rita vuelve a España buscando sus raíces, pero allí no se siente querida, ese ya no es su lugar, al fin y al cabo lleva más tiempo viviendo fuera que dentro. El desarraigo la corroe por dentro. de nuevo vuelve a sus mujeres: Pepita, sus hermanas, las vecinas del edificio de emigrantes, la Madrina... Personajes de fuerza y carácter que todas querríamos tener a nuestro lado en tragedias como las que sacuden a Rita. Esta lectura conjunto ha sido super fructífera y ha dado para mucho en twitter, comentando muchas cosas entre los afortunados lectores que estábamos participando. Si vuestros abuelos o padres tuvieran un secreto de esos que pueden cambiarlo todo querríais que os lo confesaran? Qué cosas coleccionamos y querríamos dejar a nuestros hijos o nietos para que sepan que es algo que ha formado parte de nuestra vida o que ha forjado nuestra personalidad? También pusimos en común algunas palabras que extraíamos de la lectura y que todos creíamos que representaban esta lectura como resiliencia, desarraigo, unión entre mujeres, búsqueda de tus raíces y orígenes, fuerza, pérdidas, y yo también añadiría maternidad, rechazo, crianza, secretos... " - Mamá, un secreto existe para ser silenciado, por eso es secreto. Revelarlo es anular su existencia , convertirlo en humo, y entonces la venganza del secreto puede ser terrible - dijo sonriendo -. Yo los secretos ni tocarlos. Los dejo tranquilos en sus cajitas. Es lo mejor mamá, te lo aseguro". La prosa de la autora es impecable, se nota que sus emociones las ha traspasado a las páginas, ese homenaje a los suyos y a sus orígenes le ha salido del corazón. Es todo muy lírico, muy de sentimientos, de piel, de afecto, de ternura. En ocasiones parecía que las palabras eran dibujadas en el papel. El final me ha gustado mucho. Un final amable que el yayo se merecía. Porque cada uno quiere a su manera y lleva las desgracias también a su forma. Si Rita lo ha pasado mal, él también ha tenido sus tragedias. Me ha gustado conocer a Lola y saber que su nieta le ha hecho el mejor regalo que podía hacerle en esos momentos. En definitiva, nos encontramos ante una novela intimista y personal, escrita desde el corazón, en la que se narra una vida que no ha sido fácil, pero al final es una vida llena de recuerdos que Rita nos asegura que le ha valido la pena vivir, porque sin unas cosas no hubiera encontrado otras. Con una familia que es la que has encontrado por el camino y has escogido, y que aumenta la saga de las mujeres de tu familia, mujeres fuertes y poderosas, que han llevado a esta nieta a ser lo que es hoy día y a seguir la senda de la Abuela Rita. Con la mejor de las herencias recibidas, para comprender su pasado y encarar su futuro, por favor os pido no dejeis pasar esta novela por alto. La tenéis que tener ya entre vuestras manos. Enlace: https://losauguriosdelaluna... + Leer más |