El vizconde que me amó

Estamos ante la segunda entrega de la serie Bridgerton, donde en esta ocasión el protagonista es Anthony, el hermano mayor de esta gran familia. Siguiendo la misma estela de su primera entrega, en esta novela volvemos a encontrar un esquema narrativo idéntico a El duque y yo, donde se abre la temporada de la alta sociedad victoriana y todos los jóvenes intentan encontrar marido y esposa. En mi opinión, el esquema de este libro es idéntico al anterior, dejando muy poco a la imaginación, ya que se repiten los mismos giros argumentales y algunas escenas son muy parecidas. No obstante, también es cierto que es una novela que me ha encantado por la época, ambientación festiva y el romance tan inocente a la par que sensual de la pareja.

En referencia al romance, me ha gustado cómo se conocen los protagonistas con la reticencia por parte de Kate y el aire de conquistador nato de Anthony. Juntos conforman una pareja muy explosiva por sus personalidades fuertes y, aunque al principio no se soportan, es muy divertido presenciar cómo se atraen e intentan negar lo evidente. La evolución del idilio amoroso es muy natural porque se van gustando a medida que se van conociendo y, en ese sentido, pienso que la historia se parece muchísimo a la de Daphne y Simón. No obstante, Anthony y Kate nos brindan muchas escenas memorables jugando con sus hermanos al palamallo, con sus particulares guerras dialécticas o los encuentros subidos de tono en el que Kate se avergüenza y Anthony da rienda suelta a sus dotes de seductor.

Como tramas secundarias, cabe destacar la incógnita sobre lady Whistledown que con su lengua viperina adereza la temporada londinense. Me encanta el tono irónico de sus artículos y cómo ameniza los comienzos de capítulos, aunque en este libro he echado en falta que nadie tenga interés en averiguar su identidad. También he echado de menos las intervenciones de la familia Bridgerton en general, pues tanto Violet como el resto de hermanos son personajes con muchísimo potencial.

En cuanto a personajes, en este título tenemos la oportunidad de conocer más a fondo a Anthony, un joven que tras su fachada de vividor, tiene responsabilidades para con su familia y esconde algunos miedos inconfesables. al principio, el motivo de Anthony de no enamorarse me parecía un poco absurdo, pero a medida que avanzaba la historia, comprendí que más que una decisión era una obsesión y que realmente para él era un gran problema aceptar la muerte. En ese sentido, la autora me ha convencido por cómo gestiona cada persona sus temores, pues te invita a reflexionar que para lo que una persona es una nimiedad, para otros es todo un mundo. En referencia a Kate, me ha parecido una protagonista fuerte, familiar y con muchos valores a la que es muy fácil cogerle cariño. Además, es muy divertida por cómo se enfrenta a Anthony sin amedrentarse y adorable cuando se ruboriza ante los encuentros íntimos.

Narrado en tercera persona, Julia Quinn ha vuelto a encandilarme con esta nueva entrega gracias a la ambientación victoriana, los vestidos de época y las cálidas tardes de té. Un título de lectura muy ágil por la sencillez de la historia, el gancho de sus diálogos y el desparpajo de sus personajes.

En definitiva, El vizconde que me amó es una novela acogedora y con personajes brillantes que te invita a pasar una divertida tarde de pastas y té de lo más romántica y sensual.

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