—¡Chilla, mujer de fuego! Entonces ardió. Ningún hombre pudo hacerle sombra. |
—¡Chilla, mujer de fuego! Entonces ardió. Ningún hombre pudo hacerle sombra. |
Nunca antes había encontrado a alguien en un verbo: volar. Porque tú no caminas, tampoco corres, extiendes las alas y emprendes tu propio vuelo, y es ahí donde encontré las mías; el día en que abriste mi jaula y me enseñaste el cielo. |
y me has devuelto la capacidad de soñar con el miedo de volver a perder a alguien. |
Perdóname, pero es que ya no te quiero tanto. Te perdono por no quererme demasidado |
ÉL. Es una de esas personas que creen en mí de la única manera que se puede amar: con los ojos cerrados. |
La libertad será la mas grande de todas las bellezas y no rozaremos una boca que no sepa pronunciarla. |
Y necesitaré tus uñas para arrancarle este poema al pasado, que sin él, no seríamos nosotros, y con él, jamás olvidaras lo que te quiero, aunque no sepamos tenernos. |
Una mujer con la piel violeta que no entiende que el amor es una revolución sin golpes. Que hay algo más... |
Y es que no encuentro mejor momento que un verso para confesarte que tú mereces todo lo que yo no puedo sostener con las manos |
Quién nos lo iba a decir ... Aunque tus finales justificasen mis miedos y seas lo que el viento dejó, torres mas altas construimos |
Marinero en tierra