Que pensarías si en una primera escena del libro, encuentras a un hombre comiendo una cena sencilla, añorando comerse un buen pedazo de carne, mientras su esposa le mira comer y sus hijos se fueron a la cama temprano, con hambre, a fin de que su padre tuviera una mejor comida. No digas que no, fluyen los sentimientos de indignación y crítica. Pues bien, igual los sentí e igual mantuve esa sensación por buena parte del cuento. Sin embargo, no todo es lo que parece, dependiendo de quién y cómo se mire, hay injusticias que las personas aceptan sobre sí, con el objetivo de obtener un bien mayor. No quiere decir que esto sea bueno, simplemente es lo que es. Se trata de un cuento sobre los esfuerzos por la sobrevivencia, la reflexión de un boxeador que llega al límite de su vida, piensa y reflexiona sobre lo que ha hecho y lo que le llevó a esa última pelea y sus consecuencias. Donde sin duda, recuerdas aquella frase de “Juventud divino tesoro”, pero que además valoras la importancia que solo la experiencia te puede dar, y que hace que te aferres a una última esperanza. Es un cuento diferente, si, se basa en el boxeo, lo advierto. Si no sabes nada del tema, tranquilo, que te lo describe paso a paso, lo cual también puede ser pesado para quienes no mostramos gusto por él. Suerte si decides leerlo. + Leer más |