Cress: Las crónicas lunares, 3

—Por cierto, tienes el cabello hecho un desastre. De verdad, Cinder, ¿no puedes verte presentable ni siquiera cinco minutos?
Cinder se apoyó en Iko y se puso de pie.
—Soy una mecánica.

"Entonces iré a la Luna y comenzaré una revolución"

Cinder se dió cuenta de que no era mejor que el taumaturgo. Esto realmente era una guerra, y ella en verdad estaba en el medio.

Odiaba a Levana. Se odiaba a el mismo por haberse dado por vencido ante ella.

La ventana se desvaneció, sustituida por oscuridad y entonces..
Entonces...
Ahí estaba él.
Carswell Thorne.

—No me importan las cicatrices -Dijo Wolf, encogiéndose de hombros. Una chispa maliciosa brillo en sus ojos-. Ahora me traen mejores recuerdos que antes

Ella tenía que encontrarlos primero
Porque tenía que protegerlos.

"Cuando era solo una niña, la bruja la encerró en una torre que no tenía puertas ni escaleras"

Su tristeza no era suficiente. Su luto no era suficiente. Pero era todo lo que tenía

Sería uno de esos romances épicos que surgen con una explosión y arden al rojo vivo por toda la eternidad. El tipo de amor que el tiempo, la distancia o incluso la muerte no podrían separar