Charles es el único hijo de el rey de Inglaterra, pero su comportamiento es todo lo contrario a lo que necesita para llegar al trono. Aunque él no quiere ni verlo, solo le interesa el dinero y las mujeres. Sin embargo, todo dará un giro de 180° cuando se tope con una taxista que no dudará en darle su más sincera opinión sobre el príncipe, solo que Anna no sabe que su cliente es él. A partir de aquí, ya nada será lo mismo. Las palabras de Anna traerán consigo una serie de consecuencias y se verá obligada a pasar mucho tiempo con el príncipe. Anna es una joven que lo tiene difícil en el panorama laboral, por eso termina como taxista. Colocó su confianza y amor en la persona equivocada y lo está pagando todavía. Su amiga y su familia son sus grandes pilares. Charles actúa como actúa por culpa de su pasado. Podía haber elegido otro camino, pero para él es demasiado doloroso. Huye de su deber como príncipe por sus miedos y se refugia en los vicios y el arte. Ambos se odian y pican desde el principio, pero estar tanto tiempo juntos les hace conocerse más a fondo y cometer locuras. Me ha resultado un libro muy ágil de leer, además, me encuentro con que la pluma de Lizbeth te lleva a reflexionar en varias ocasiones. Es una historia entretenida, con gancho, y que puedo asegurar que he disfrutado. Lo que no me esperaba era que me fuera a dejar con ese final 🤡 así que ahora mismo estoy esperando la fecha de publicación del segundo. + Leer más |