Los Bandídez

Esta lectura infantil, divertida, ágil y tierna, se lee con el sabor que solo las cosas extravagantes e inocentes aportan. Es un libro con una edición maravillosa, que nos permite acompañar a Vilja en ese viaje no esperado gracias al que descubre cómo disfrutar de la vida, de los pequeños detalles, de romper con la rutina, de escuchar a los demás y de valorar lo que se tienen.

Es verdad que no es una historia al uso, y justo eso la hace más interesante. Imaginad un asalto a un coche en el que viaja una familia que tiene como consecuencia, además del robo de enseres y comida, el robo de una de las hijas; imaginad que esa niña de diez años empieza a conocer a la estrambótica familia que la tiene prisionera y empieza a disfrutar del vómito de alienígena o a descubrir qué son los pedos de ratón; imaginad una vida nómada para cumplir un sueño o huir de una realidad; todo eso y muchísimo más está en esta pequeña gran novela que creo es muy adecuada para lectores de 10 años.

Capítulos cortos con títulos esclarecedores, un bonito viaje, deseos, sueños e ilusiones, y todo de la mano de una gran observadora que todo lo piensa, todo lo apunta y de todo aprende.

Me ha gustado mucho y me gustaría que mis hijos pudieran apreciar esta historia también. Tengo el segundo libro en casa y no tardaré en leerlo.

La de mi hija de 12 años (3,5 *):
La protagonista de este libro, Vilja, es raptada por Los Bandídez cuando va a visitar a sus abuelos. Aunque al principio tenía algo de miedo, resulta que pasó el mejor verano de vida porque descubre otra forma de vivir, llena de risas y gominolas. El libro me ha gustado bastante porque es gracioso, divertido y te ríes con cada capítulo.

La mía (4*):
El choque que para una preadolescente supone una forma de vida o de relacionarse, basada en la confianza, la libertad y el respeto (por muy niño que uno sea), completamente diferente a lo habitual es el núcleo de "Los Bandídez". Esto viene acompañado de una serie de situaciones disparatadas narradas de forma muy original y divertida, así como de un ritmo endiablado.

Buena opción para niños (10-12 años, más o menos) y no tan niños.