Intimidades

Mientras yo la miraba me estremecí, era tan extraño hablar por ella, tan erróneo utilizar ese yo que era suyo y no mío, esa palabra que no era suficientemente amplia.

Es sorprendentemente fácil olvidar lo que hemos presenciado, la imagen atroz o la voz que pronuncia lo impronunciable; para existir en el mundo tenemos que olvidar, y eso hacemos, vivimos en un estado de lo sé pero no lo sé.

Resulta inquietante lo mutable que era nuestra identidad y, por tanto, el curso de nuestra vida

Eso era lo que ofrecía una nueva relación, pensé, la oportunidad de ser alguien distinto a quien se es.

La apariencia de simplicidad no es lo mismo que la simplicidad en sí (...)

Pero ninguno de nosotros somos capaces de ver realmente el mundo en el vivimos (...) vivimos en un estado de lo sé pero no lo sé.