Misery

Lo que define a esta novela es el terror psicológico. Con solo dos personajes y casi un único escenario, pensaba que se me haría súper monótono, pero lo cierto es que funciona bastante bien. de hecho, probablemente ayude a crear ese ambiente de claustrofobia que se respira a veces en la historia.

Stephen King sabe cómo meterte la tensión en el cuerpo en cada capítulo. Te sientes un poco como el protagonista, sin saber qué puede pasar en ese momento por la cabeza de ella: Annie Wilkes, un personaje maravilloso, muy bien construido.

El miedo, la desesperación, el dolor, el sufrimiento, la tensión, la indefensión: todo lo vivimos de la mano de Paul Sheldon, al que acompañamos en todas las fases por las que pasa en su encierro y en su tortura. Ha sido una historia distinta a lo que estoy acostumbrada a leer del autor, pero me ha gustado en general. Ha sido toda una experiencia.

Algunas curiosidades acerca de Misery:
- Cuando Stephen King publicó en 1984 su novela “Los ojos del Dragón”, muchos de los fanáticos del autor la rechazaron, al ser un libro de fantasía épica, lejos del género del terror al que estaban acostumbrados. Este hecho fue una de las inspiraciones del autor para crear la historia de Misery.
- Por otra parte, en el libro también se muestra de forma continua la adicción del protagonista a la medicación que le administra su secuestradora y fan número uno. El autor escribió este libro cuando tenía problemas con las drogas y el alcohol, por lo que supo reflejarlo en la historia, comparando, además, su adicción y su lucha por dejarla con Annie Wilkes: “Dios, ella nunca quiso irse”.