Infiltrado

Resulta harto difícil determinar quien es el infiltrado y en donde está la fuga que propicia esa infiltración.

Para empezar podríamos tomar a Connie Willis, como sospechosa, en vista de que aborda un tema que no se le da muy bien, ( o al menos eso creo) esto tiene mas de novela negra policiaca, que de ciencia ficción, con todos sus elementos, incluida la rubia “femme fatal” que pone de cabeza al investigador. ,un caso típico con estratagemas y engaños de ambas partes, un culpable de facto, innumerables revelaciones fortuitas, sospechas de todos por y para todos. O sea una seguidilla de “Deus ex Machine ‘s “. El caso al final irresuelto, por virtud de la única vislumbre de ciencia ficción, mejor quedaría decirle falsa ciencia, que es la que más fácil ( y caro) cobra el aplauso del crédulo público,mentalismo, posesión , mediums, gurús, falsos profetas, guías espirituales. Llámeles como quiera.

Sospechase también de la novela, que de corte investigativo, se cuela a la ciencia ficción y hasta premio recibe, Para mi esto es un calco mal hecho de “ El Halcón Maltés” sin halcón. Hay dudas , léala , bajo su riesgo.

Infiltrado el desastroso enfoque y la precipitada manera de abordarlo por parte de la autora, leerla no me decepciona, el conjunto si.

Infiltrado el pasado de todos en el presente de nadie, tal vez habría que recurrir a Scrooge en el “ cuento de navidad . “ Vivir juntos pasado presente y futuro “ así nada nos sorprendería.

Infiltrados los ancestrales temas de adivinación y de sus detractores. Los que se apegan a los hechos científicos y dudan de cualquier para- lo que sea, normal, priscologico , . Es lo que es y punto, nada de revelaciones a través de nada ni de nadie. Desafortunadamente aquellos siempre tienen éxito, estos no tanto.

Entrando un poco al tema Mencken periodista escéptico destapa charlatanes y que cubrió “ El juicio del Mono” que confrontaba las teorías evolucionista y creacionista, en el Estado de Tenesse en EEUU ( 1925) . E infiltra a una pitonisa en la actualidad, con diatribas acerca de lo que pregona.. ahora… el punto es desentrañar donde está la falsedad y quien proporciona el material para el doble engaño ( más infiltraciones) .

La rubia actriz que por tres duros acepta ser asistente de Rob, periodista escéptico que destapa fraudes y engaños e gurús, etc, etc, en la época actual, es digamos figura controvertida, inciita asu jefe a desenmascarar a Ariaura que “ canaliza” espíritus en su nada accesible ($) espectáculo esto resulta en un Galimatías tipo “ trampa 22” de Joseph Heller. Si esta mintiendo con Mencken, es canalizadora como Isis y a la inversa…¿ como destapar el fraude sin validarlo?
Mas infiltraciones.

No abundo mas pues ya otorgue algunos visos de Spoiler, más infiltraciones.

Pero lo cierto es que Connie Willis, se ha infiltrado en mi alma , y me divierto un montón leyéndola aunque sea en temas como este que infiltran su esencia, e infiltro dos recomendaciones… las que me captaron como su seguidor “ oveja Mansa” , “ Transito” y cuelo ( o infiltro ) “ todos sentados” y un cuento de navidad “Posada” que me encantó.

Total que aquí, desde mi perspectiva, la ciencia ficción está ausente, o tan bien infiltrada que me paso desapercibida.
Porque, los charlatanes y sus desenmascaradores resultan, absolutamente verdaderos…y abundantes, sobre todo los primeros y allí no hay ciencia, son pura ficción, que el público traga y saborea con gusto. Se me ocurre un refrán muy fuerte “el que por su gusto…. Pero ya son demasiadas infiltraciones.

La trama es tan loca que no se me habría ocurrido leer el libro si no fuera porque conozco a la autora. En esta ocasión es un relato breve, según la edición de 70 a 96 páginas.
No me veo capaz de contaros de qué trata el libro sin hacer que exploten algunas cabezas como si fueran palomitas de maíz. Por vuestra integridad física únicamente diré que es una rareza, con humor e ironía critica la inteligencia y estilo de vida norteamericanos (aunque la autora también lo es).
Si os impresionan esas cosas, ganó el premio Hugo en 2006 por esta historia. En realidad, parece más un relato negro de estilo clásico (con una femme fatal irresistible incluida).
Es una lectura más ligera de lo habitual en Willis, pero tiene aspectos interesantes.