La ballena perdida

... a veces la vida real no va como nos gustaría, pero eso no significa que tengamos que rendirnos, sino que tenemos que intentarlo con más fuerza aún.

Si vemos una le ofreceremos la posibilidad de venir con nosotros si quiere, no al revés. El océano es su mundo, y es importante que recordemos que aquí sólo somos invitados.

Hay batallas en las que uno no puede combatir. Pero hay otras... hay otras batallas en las que todos podemos hacer algo.

Y la conciencia del problema es el corazón del cambio.

Había llegado el gran momento. Aunque no tenía ninguna garantía de ver a Morro Blanco, a Rio se le aceleró el pulso y sintió de repente el deseo imperioso de que su madre estuviera con él. Era una sensación tan poderosa que tuvo que agarrarse a la barca. Y, aunque su madre no estaba con él, él si que estaba. Sería los ojos de ella.

Nadie puede salvar el mundo por sí solo

A veces la vida real no va como nos gustaría, pero eso no significa que tengamos que rendirnos, sino que tenemos que intentarlo con más fuerzas aún.

Así es el océano: el mejor medicamento del mundo

A pesar de todas las cosas horribles por las que ellas tienen que pasar para sobrevivir, no dejan de nadar. Igual que tú

Cuando respiran, los dos chorros se juntan en la punta, así, y parece como si exhalasen corazones.