Los deseos son el motor de la vida. ¿Qué importa si se cumplen o no? Lo que importa es no dejar de moverse, de buscar. No perder el rumbo ¿comprendes, niña? Nunca dejes de desear. Si no, estás muerta.
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Los deseos son el motor de la vida. ¿Qué importa si se cumplen o no? Lo que importa es no dejar de moverse, de buscar. No perder el rumbo ¿comprendes, niña? Nunca dejes de desear. Si no, estás muerta.
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El dolor te recuerda que estas vivo -susurro Anna-, que eres real.
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Cada vez que te mires en el espejo, allí estará, contándote una historia sobre tu propia vida.
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La vida esta hecha de detalles. Somos lo que hacemos y cómo lo hacemos - Dijo Anna.
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Fue mientras te buscaba, que me descubrí. Aquí, entre senderos de lavanda, me descubrí- dijo Anna.
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Todos queremos ser mirados con amor. También yo.
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La pobre chica empezó a tener un miedo horrible a desparecer. Dudaba de su propia existencia. Es decir, si nadie te ve, si nadie se preocupa por ti, ¿existes en realidad? Eso la atormentaba.
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Pascal, por su parte comprendió que había más de una manera de conversar. El silencio era una. mirarse a los ojos, otra.
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Si pierdes el foco dejas de ver la realiad y el panaroma se torna borroso.
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No había soledad más grande que sentirse a la deriva como una cometa suelta en el viento.
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¿Quién escribió la saga?