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Dentro de las obras de plenitud de Federico García Loca se encuentra Una trilogía rural (Lumen, 2022), ilustrada por Ilu Ros y compuesta por Bodas de sangre (1931), Yerma (1934) y La casa de Bernarda Alba (1936). En ellas se muestra la la marginación social de la mujer y, por primera vez, su protagonismo es crudo y real. Bodas de sangre y Yerma son tragedias, con coros, se mezcla prosa y verso, y los elementos simbólicos y alegóricos tienen un gran peso. En la primera, basada en hechos reales, la novia huye con su antiguo novio, Leonardo Félix -único personaje con nombre propio-, el día de su boda, desencadenando la catástrofe. Yerma aborda el tema de la esterilidad y la opresión de la mujer, que no pudiendo realizar su deseo ni escapar, termina cometiendo un asesinato, frustrando, así, cualquier esperanza. La casa de Bernarda Alba, una de las cumbres de Lorca, coloca sobre las tablas el enfrentamiento entre libertad y autoridad, las pulsiones eróticas, el contraste entre instintos y normas sociales... Reflexionando sobre el poder y sus mecanismos en la vida privada, por medio de su protagonista quien, de modo viril, asume, impone y perpetúa por la fuerza un código represivo a sus hijas. Todas ellas parecen dispuestas a aceptar las reglas, salvo la menor, cuyo acto de rebeldía culmina con el «¡Silencio! que cierra la obra». Cualquier espacio se queda pequeño para hablar de Federico, cuyo cuerpo aún no hemos recuperado, pero que ha vencido al olvido con títulos que es necesario leer más de una vez en la vida. Esta edición ilustrada moderniza al clásico, le insufla una nueva vida y nos recuerda que ya no tenemos excusa para acercarnos al polifacético creador andaluz. Enlace: https://www.instagram.com/mi.. |
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