¿Es que he de venerar aquello de lo que tú haces burla?
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¿Es que he de venerar aquello de lo que tú haces burla?
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¡No os quedéis ahí tan afectados! ¿Es que he hecho alto monstruoso? ¿He tocado al ungido por los cielos? No temáis. No le pondré la mano encima. ¿Es que no veis el estigma sobre su frente? Dios le ha marcado
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La virtud puede ser estricta, pero nunca cruel, nunca inhumana ...
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Decidle que debe cuidar los sueños de su juventud cuando sea hombre, que no ha de abrir el corazón, que es flor divina y delicada, al insecto mortal de la afamada razón
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¿Acaso un grupo de grandes de España son el tribunal ante el que una reina debe rendir cuentas de sus actos?
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Cualquier virtud está libre de mácula ... hasta el instante en el que se la pone a prueba
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Los súbditos que habéis perdido por la fe eran los más nobles de todos. La reina Isabel recibe con sus maternales brazos abiertos a los fugitivos y Bretaña floree con las artes de nuestro país
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La gente os ha obligado; ellos han renunciado voluntariamente a su nobleza, han descendido por voluntad propia a este nivel tan bajo. Huyen aterrados del fantasma de su propia grandeza, se agradan en su miseria, adornan sus cadenas de cobarde sabiduría y llaman virtuoso al que las lleva con elegancia. Ése es el mundo que habéis recibido. Así se lo transmitieron a vuestro gran padre. ¿Cómo podríais honrar a la humanidad tras contemplar esta triste mutilación?
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Soy peligroso porque he reflexionado sobre mí mismo
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¿Y qué otra cosa es la casualidad que la piedra en bruto que cobra vida en manos del escultor? La providencia aporta la casualidad, pero son los seres humanos los que deben darle forma para lograr un fin
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Es un poema épico griego compuesto por 24 cantos, atribuido al poeta griego Homero. Narra la vuelta a casa, tras la guerra de Troya, del héroe griego Ulises