Casket of Souls

Penúltimo volumen de la saga Nightrunner hasta la fecha, en el que Lynn Flewelling vuelve a deleitarnos con las aventuras y desventuras de Seregil y Alec en Rhíminee. Esta vez, Thero y Micum cobran más protagonismo que en anteriores entregas y tienen capítulos propios e intervenciones en las que destacan.

He disfrutado mucho de la lectura, con sus intrigas de corte, habladurías y rencillas entre los nobles de la ciudad, que en esta ocasión intentan poner en jaque a la facción rival. Por otro lado, tenemos una misteriosa plaga que azota a los barrios cercanos al puerto y amenaza con expandirse por toda la ciudad. En medio de todo, la siempre vibrante actividad de los Watchers y como telón de fondo, la guerra contra Plenimar.

Ambas subtramas confluyen en la principal mediante una intriga bien hilada. Desde buen comienzo conocemos al antagonista mientras que los protagonistas permanecen envueltos en la investigación del misterio sin tener ni idea de con quién están tratando, a pesar de tenerlo demasiado cerca. Ese tipo de planteamiento me encanta, más que el hecho de intentar averiguar como lector quién es el culpable, ya que de este modo puedo disfrutar de dos puntos de vista bien trabajados y que se desarrollan en paralelo hasta que se resuelve el misterio. al fin y al cabo, las historias de Lynn Flewelling en Nightrunner son novelas de aventuras e intrigas palaciegas, no de detectives al uso.

Ha sido un placer leer más sobre Rhíminee y los personajes tan entrañables que la habitan. Me va a costar despedirme en el siguiente volumen de Seregil, Alec, Thero y Micum, Klia y Beka y del resto de la familia Cavish.

«Luck in the shadows, and in the light».