Ninguno es tan viejo, que no pueda vivir un año ni tan mozo, que hoy no pudiese morir
|
Ninguno es tan viejo, que no pueda vivir un año ni tan mozo, que hoy no pudiese morir
|
Como de las apariencias a la existencia, como de lo vivido a lo pintado, como de la sombra a lo real, tanta diferencia hay del fuego, que dices, al que me quema
|
Tú lloras de tristeza juzgándome cruel; yo lloro de placer viéndote tan fiel
|
Marinero en tierra