Mi destino eras tú nº 2)

En el sorteo realizado por Juani Fernández en el que los autores regalaban un libro, fui afortunada con un libro de Paloma Sánchez Cortés y elegí este porque había leído el primero hace un tiempo.
Lo primero, la historia es buena y tiene una trama muy interesante, pero se pierde el hilo entre tanto personaje y tanto parentesco entre ellos. Entre hermanos, primos, padres, madres y madrastras, tíos y demás al final hay momentos en que tienes que pararte a pensar quién es quien y que pinta en esa escena.
Por otro lado, la corrección necesita un buen repaso, no puedo darle más puntuación porque sinceramente, la escritora ha desarrollado lo que tenía en mente, pero debería darle un repaso a lo que escribe.
Martha y Gabriel estaban destinados a terminar juntos, pero las reacciones de ellos en determinadas situaciones son inaceptables, y respecto a Desiree y Daniel no es que sean inaceptables, es que son incomprensibles, no puedes estar enamorado de una persona y según te deja sientes que tu amor es otra. Creo que todo necesita un tiempo y aquí no se lo dan, es todo muy precipitado y en algún caso sin sentido.
Se podía haber desarrollado todo con más calma y sin intentar introducir tantos personajes con su situación personal y circunstancias cada uno, al final es una mezcla demasiado densa.
El epílogo no es de lo más acertado, sabemos que hay una tercera parte pero en lugar de dejar al lector con el ansía de leer el siguiente libro, hay datos que hablan de años después y que no aportan nada.

Esta novela consta de 295 páginas divididas en 19 capítulos más epílogo narrada en tercera persona.

Martha trabaja como enfermera en un consultorio de un barrio pobre de Londres, bueno lo de trabajar es un decir ya que no gana nada de dinero y lo hace para ayudar a los más desfavorecidos, a pesar de las protestas de su padre y no por trabajar desinteresadamente, si no por hacerlo en un barrio marginal siendo hija de un embajador.

Desireé la hermana menor de Martha esta apunto de ser presentada en sociedad, algo que no la hace demasiada ilusión ya que es una joven erudita y sabe que ningún hombre la va ha entender, a aparte que prefiere los libros a verse desposándose tan joven.

Martha y Desireé empezaran a ser cortejadas por los hermanos Seymour, algo que agrada a los padres de las jóvenes. Pero Martha antes de tomar una decisión tiene que saber que siente por Gabriel, su amor de juventud.

Pufff me pasaría el día hablando de este libro y de todo lo que sucede entre sus páginas, que os aseguro que no es poco. El primer libro de esta trilogía me gustó, pero es que este me ha enamorado, me duró dos tardes y lo que me hizo sentir fue maravilloso, me reí, me enfadé, pero también me hizo llorar bastante, no es que sea triste, pero me pilló en un momento bajo y muchas escenas entre una de las parejas protagonistas me rompieron. Las dos hermanas pequeñas de los Giménez son increïbles, por un lado Martha me ha gustado esa determinación por luchar a pesar de las adversidades por la persona que ama a pesar de poder tener prácticamente al hombre que quiera, y por supuesto por ejercer su profesión como enfermera en una época que la mujer de la alta sociedad no tenía que trabajar. Y por otro lado Desireé me ha dejado completamente flipada y me he reído muchísimo con ella, una jovencita con un carácter fuerte, con ganas de descubrir cosas no aptas para damiselas y con unas salidas de tono que dejan con la boca abierta. Aunque los libros sean autoconclusivos por que van de cada una de las hermanas Giménez, siempre es recomendable leerlos por orden y más en esta historia ya que suceden cosas en el libro anterior que os ayudaran a comprender mejor a los personajes a parte que la pareja del libro anterior sale en este y entonces sí, que os harías spoiler del primer libro. Aclarado esto, solo me queda decir, que si os gusta la romántica de época, si o sí, tenéis que leer este libro por que es una joya y de las grandes. ¡Paloma estoy deseando que publiques la tercera parte!
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