Soñé en La Habana

"Qué distinta era La Habana de como la había soñado. Cuantas reclamaciones pondría-si supiera donde hacerlo-a los silvios, pablos, fernandos pérez y titones que me habían llenado la cabeza de pájaros."

Piensa, cree, sueña, y...
!Atrévete a viajar¡
A La Habana.

Yo soy el hombre predilecto para tu felisidad porque también quiero que seas tú la mujer que llene de pasión y amor mi corazón

No quiero que haya mentiras entre nosotros, quiero que todo sea sinsero, ¿ok? Y por eso tengo que decirte que nací en el año 86

Primera lección: no des por hecho que los demás son como tú hasta que te lo demuestren

Todo el mundo merece una oportunidad, en el trabajo y en la vida, y no sería yo quien se la negara a nadie, mucho menos a Yodiel

Hay veces en las que nos vemos a nosotros mismos como protagonistas de una película. Sabemos que lo que estamos sintiendo es especial, igual que lo que ven nuestros ojos.

A veces me sorprendía preguntándome: ¿Quién ganará, mi mitad emocional o mi mitad racional? Otras, las menos, una frase cobraba forma en el punto más recóndito de mi cerebro: "Esta historia terminará. Solo quiero saber cómo".

¿Qué clase de país era ese en el que sus ciudadanos no podían moverse con libertad, en el que no podían vivir donde les diera la gana ni pasear con quien quisieran?

La vida a veces es un asco. Te pasas una buena parte de ella constreñida por tus padres, y después por todo tipo de obligaciones, y a veces hay que imponerse y hacer las cosas porque sí, porque te da la gana.