Nueva York es una ventana sin cortinas

Tenía pendiente desde hacía tiempo leer este ensayo de Cognetti, autor que me conquistó con “Las ocho montañas” y del que seguí leyendo lo que se iba publicando en nuestro país, así que aproveché que unos amigos estaban de viaje allí para ponerme con él. En esta ocasión no se trata de una novela sino de un ensayo dedicado a la ciudad de Nueva York en la que el autor vivió durante largas temporadas.

Lo primero que quería destacar es que gracias a este ensayo he sabido que Nueva York también es conocida como Gotham debido a que Washington Irving tomó prestado ese nombre de una localidad inglesa famosa por la excentricidad de sus habitantes, lo cual le recordó a su propia ciudad, motivo por el que acuñó este nombre que tanto nos suena por nuestro querido Batman. Esta historia la incluye en el prólogo del volumen, en la que también se explica que dedicará un capítulo a cada una de las áreas que ha recorrido durante sus días allí.

Así a lo largo del libro recorremos barrios como Brooklyn Heights, Lower East side, Greenwich village, Park Slope, Williamsburg… de la mano del autor, conociendo sus vivencias en cada uno de ellos y el porqué son barrios importantes para él. Además nos pone en antecedentes históricos en cuanto a inmigración, historia judía o biografías de autores que han nacido o pasado sus días en la ciudad (como Walter Whitman, Herman Melville o Paul Auster). También hay lugar para la famosa gastronomía ítalo-americana que conoce gracias a alguno de sus amigos de la ciudad e incluso para los tópicos como patinar sobre hielo en Nochevieja en un enclave como Bryant Park.

Me ha gustado mucho regresar a la ciudad a través de este ensayo de Cognetti, hay muchas cosas que sentí del mismo modo que las sintió él, aunque mi perspectiva fuera la de la turista de unos días que no llega a conocer a fondo el lugar. Creo que puede ser una lectura estupenda para afrontar un viaje a Nueva York y acercarse a lugares no tan famosos pero que contienen grandes historias.