No sé quien decía que Dios y el Diablo son dos caras de la misma moneda, y que quien tiene mucha relación con Dios acaba teniéndola con el Diablo.
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No sé quien decía que Dios y el Diablo son dos caras de la misma moneda, y que quien tiene mucha relación con Dios acaba teniéndola con el Diablo.
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Lo único que lo ocupa la cabeza es la voz de Olga leyéndole, hace unos días, un fragmento de Los Miserables: . Pero en ese momento Melchor no ve nada
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Que la vida no hubiese cambiado en apariencia no significa que no hubiese cambiado en realidad.
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Las heridas de verdad son las que nadie ve. Las que la gente lleva en secreto. Esas son las que lo explican todo, pero de esas nadie habla.
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Tengo la impresión de que, cuanto más viejo me hago, menos entiendo a los seres humanos.
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No hay dos novelas iguales ni dos personas que hayan leído la misma novela.
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La justicia absoluta puede ser la más absoluta de las injusticias.
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Hacer justicia es bueno, para eso nos hicimos policías, pero lo bueno, llevado al extremo, se convierte en malo. Eso he aprendido en estos años y también otra cosa, que la justicia no es solo cuestión de fondo, sobre todo es cuestión de forma. Así que no respetar las formas de la justicia es lo mismo que no respetar la justicia.
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La valía de un hombre se mide por la cantidad de enemigos que tiene.
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10 negritos