Dispar…. Muy Dispar. Es difícil describir el erotismo, más aún debe serlo el escribirlo de manera que concite solo a eso, a la sutilidad, la gracia y el encanto de la seducción, una seducción que por otro lado debe ser seria, sin importar la pretensión, para un minuto, una noche , toda la vida.. constante o intermitente. Esto no es el juego sexual, es la parte seria del mismo. Lo que le convierte en memorable, o en su defecto en olvidable, y a veces risible, execrable, miserable , infumable o abominable. Estos relatos transitan por el sendero del erotismo, pero algunos desvían el rumbo, aunque ninguno demasiado. Aquel que abre la antología es más un relato de desventuras, Y algunos de ellos contienen más de tétricos que eroticos o simpáticos, como “Bordes de mujer” y “ El dogo gris. “ Para mi gusto “ la hamaca gris “ el de Esther Tusquets “ la niña lunática “ cumplen con esa cuota de erotismo con esa sutilidad que atrapa.. Erotismo que rehuye mi pensamiento y escapa entre mis dedos. Estremece mis labios y mi cuerpo. + Leer más |