Memorias de una salvaje de Srta. Bebi
La vida era un caballo. Salvaje. Un caballo en el que te suben sin ninguna otra opción y por el que muchísimas veces tienes ganas de volver al suelo. Siempre querrá llevarte a donde quiere y a veces parecerá que le pesas demasiado. Tienes dos opciones, se dijo a ella misma: vivir el trayecto angustiada y agarrándote como puedas, cerrar los ojos y rezar para que pare lo antes posible, o coger las riendas. Hacerlo con fuerza, con decisión, con coraje.
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