Aprendiz de asesino de Robin Hobb
... aunque se puede amar a un hombre sin dejar que el afecto te vende los ojos.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
... aunque se puede amar a un hombre sin dejar que el afecto te vende los ojos.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Por un breve espacio de tiempo fui feliz y, don aún más preciado, supe que lo era.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Ninguno de los dos sentía la necesidad de compartir sus sentimientos; preferíamos mantenernos a una distancia prudencial el uno del otro, pese a lo que logramos alcanzar una buena medida de comprensión mutua. Así y todo, en el baile formal que era nuestra relación, había sitio ocasionalmente para el genuino alborozo, y a veces conseguíamos danzar al son de la misma música.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Y las lecciones que aprendí se beneficiaban de las horas sin luz del mundo.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Has aprendido a guardar tus pensamientos de tal manera que casi te atemoriza permitirte saber en qué consisten. Pero intenta pronunciarlos en voz alta [...]
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Deseé un descanso que quizá hubiera conocido una vez en alguna otra parte pero que ya no conseguía recordar. Y así el sueño fue apoderándose de mí.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Ahora bien, yo he tenido hijos, y sé que los muchachos no son así. No aprenden, ni crecen, ni se comportan cuando los miras. Pero te das la vuelta, vuelves a mirar y ahí los tienes, más altos, más listos, encantadores con todos salvo con sus madres.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Querrá darte muchas cosas. Tendrás que aceptarlas, pues no hay forma educada de rechazarlas. Pero también deberás decidir si esas cosas tenderán un puente entre vosotros, o si alzarán un muro.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Resulta embriagador que te proclamen de repente el centro del mundo de alguien, aunque ese alguien sea un cachorro de ocho semanas. Hizo que me diera cuenta de lo solo que me había sentido, y durante cuánto tiempo. -Gracias- dije, e incluso a mí me sorprendió la gratitud que impregnaba mis palabras. -Muchísimas gracias.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Porque podía sentir a la gente. Y ese sentido era el que me alertaba siempre en primer lugar, el que me avisaba para que utilizara también los ojos, los oídos y el olfato para percibir cuanto me rodeaba.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Desperté sobresaltado antes de que la luna hubiera renunciado a su reinado en el firmamento, sorprendido de haber conciliado el sueño.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Todos los hilos que envolvían a la gente, los que unían a madres e hijos, a hombres y mujeres, toda la afinidad que se extendía a la familia y los vecinos, a las mascotas y al ganado, incluso a los peces del mar y las aves del cielo...todo, todo había desaparecido.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Y fue también en aquel instante cuando comprendí otra cosa: que yo no me parecía a nadie que conociese. Imaginemos que un niño crece en una aldea de ciegos, donde nadie sospecha siquiera de la existencia de ese sentido. El niño no tendría palabras con qué aludir a los colores, ni a los distintos grados de iluminación. Los demás no tendrían ni idea del modo en que ese pequeño percibe el mundo. Así me sentí en aquel momento [...]
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Pues reporta una extraña paz ceder tu capacidad de decisión a otra persona, decir: «Ve tú delante, que yo te sigo y confiaré a ciegas en que no me conduzcas hasta la muerte»
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
En cuestión de una hora, mi lugar en el mundo pareció dar un giro completo.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Cuando crees tener una idea y decides que es cierta, sin pruebas, te ciegas a otras posibilidades.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
No eres lo bastante mayor para comprender ciertas cosas. Nunca has visto a un ave salvaje atrayendo al depredador lejos de sus polluelos fingiéndose herida.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
- Ahora vas a dormir- me informó con voz pastosa-, y mañana volveremos a hacer lo mismo. Y pasado mañana. Hasta que un buen día te levantes y descubras que fuera cual fuese tu dolencia al final no te ha matado.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
[...] donde los modales exigidos eran los que cada uno tuviera y nadie esperaba que le dieras conversación. Resultaba reconfortante sentirse ignorado con esa indiferencia.
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Aprendiz de asesino de Robin Hobb
El tono de su voz delataba algo más que envidia. Desde entonces he aprendido que muchos hombres ven siempre la suerte del prójimo como una afrenta personal.
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Cual es el nombre completo de Dumbeldore?