El cineasta presenta su libro 'Dolor y gloria', que va más allá de la mera traslación del guion de su última película.
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El cineasta presenta su libro 'Dolor y gloria', que va más allá de la mera traslación del guion de su última película.
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De Pedro Almodóvar ya he visto muchas de sus películas, algunas de las cuáles son míticas para mi: “Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón” y “Mujeres al borde de un ataque de nervios”. De la obra literaria de Pedro Almodóvar Guerrero no conocía nada, esta ha sido mi primera incursión y puedo decir que he salido bastante satisfecha de ella. Se nota en sus páginas la experiencia del autor creando historias para la gran pantalla, pero como él bien expone en el cine un simple acto es sencillo y esquemático, sin más detalles, sin embargo en un libro mientras se desarrolla ese acto puedes ir desmadejando si quieres la vida interior de un personaje. El libro para él es vehículo y transmisor de sensaciones, sentimientos, y muchas historias que desarrollan más explícitamente a partir de una trama principal. La obra se divide en relatos, cada uno con su temática propia, muchos son como extensiones de sus películas, otros tienen guiños autobiográficos, y el que más llega sin duda es el dedicado a su madre. Un autor que vivió un gran movimiento cultural en nuestro país que merece ser leído por lo documentadas que son sus palabras, por el gran saber que ha ido atesorando con los años, macerándose como un buen vino. Al igual que sus películas que han ganado con solera supongo que lo mismo le pasará con su obra literaria. Por favor Pedro, no dejes de escribir nunca. + Leer más |
Pedro Almodóvar recopila 12 relatos escritos en distintas épocas de su vida en el libro El último sueño (Reservoir Books). Historias de memoria, fabulaciones fantásticas, evocaciones de su madre y experiencias propias conectadas con algunas de sus películas.
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Una lectura diferente en relación a su formato, ya que se trata de un guión cinematográfico, que además está acompañado de fotografías de la película que ya se había estrenado anteriormente. Curiosas son también las aportaciones en las notas que añade el director, Almodóvar, sobre este drama que fue interpretado por Penélope Cruz y Milena Smit, ellas son las madres paralelas que dan todo el protagonismo a la obra, además de Israel Ejalde y Aitana Sánchez Gijón en papeles importantes dentro de la película y que también aparecen sus fotografías en el libro. Grandes actores para desarrollar una trama donde el dilema moral que representan las madres paralelas, además del gran tema histórico sobre la excavación de las fosas de los desaparecidos en la guerra civil española, hacen una obra intensa, tensa y dramática, aunque en este sentido, no hay ni revancha , ni ajuste de cuentas. Y además de las explicaciones de Pedro Almodóvar, también encontraremos al final de la lectura el epílogo de Vicente Molina Foix aclarando aspectos interesantes, que aparecen en este guión, y que según el escritor, son absolutamente pensados y requeridos por el autor que nunca deja nada al azar y están llenos de sentido. Todo está supervisado, tanto los detalles más pequeños como el color de las paredes, los cuadros y la decoración de las casas que aparecen y son protagonistas también de la obra. Una historia que comienza con los nacimientos de dos niñas y acabará con los muertos rescatados de las fosas y del olvido. Una vez, iniciada esta reseña, también hay que explicar el título propuesto, Madres paralelas, que evidentemente, es sólo una sencilla y clara aportación al contenido que refleja, ya que las protagonistas esenciales, en la obra son Janis y Ana, van a ser madres al mismo tiempo y en el mismo hospital, aunque Janis tiene cuarenta años, y Ana , una joven de tan solo diecisiete años y por tanto, muestran actitudes muy distintas ante esta misma situación. La joven Ana está asustada, y Janis más tranquila, intenta animarla. Así las dos hablan y sabremos que ninguna está casada , serán madres solteras pero Janis está muy contenta y no se arrepiente y, sin embargo, Ana está traumatizada y temerosa. Conoceremos también a su madre, a Teresa, la madre de Ana que siempre antepuso su profesión de actriz a la crianza de su hija, y también conoceremos a Elena, una amiga de Janis y la editora de una revista en la que trabaja Janis como fotógrafa, que las acompañarán en estos momentos. Y una vez con las niñas, ambas están en sus domicilios , las dos contentas y animadas cuidando y adorando a sus pequeñas. Pero en ambas casas se producen situaciones que motivarán, además, cambios importantes en sus vidas. Grandes cambios que provocarán de nuevo, una manera de afrontar una realidad, en la que las dos protagonistas se encontrarán y vivirán situaciones juntas y difíciles ya que sus vidas quedarán unidas irremediablemente . ¿Qué ha ocurrido? He aquí la gran pregunta que hay que descubrir. Me ha parecido, a veces, que Pedro Almodóvar, oculta una primera intención que es la de hacernos participar en un juego a modo de yo-yo, porque, insisto es mi impresión, lía la cuerda de ese yo-yo para llevarnos al pasado, a las radionovelas en las que situaciones como las que presenta el libro eran habituales, eran casi hegemónicas. El yo-yo con su cuerda prieta en la mano, ahora se lanzará para llevarla al presente haciendo que se conjuguen casi armoniosamente pasado y futuro. El pasado con un intercambio de niñas recién nacidas y el presente cercano en la tarea de buscar los desaparecidos y muertos de la guerra civil en las cunetas. En realidad, se trata de un melodrama psicológico y una historia compleja en la que convergen y se entremezclan las maternidades para poder entender el pasado con la función de afrontar el futuro. Ambientada entre los años 2016 y 2019, antes de la ley sobre la memoria histórica y democrática vigente. Por lo tanto también hay una crítica a esta situación de que todavía haya muertos en las cunetas o campos y sin identificar . De cualquier modo, otro aspecto a tener en cuenta es que es una obra donde las mujeres son el motivo fundamental aunque aparecerá Arturo, que será el único personaje masculino con un importante papel como el antropólogo forense que ayuda a descubrir a los desaparecidos de la guerra , además de tener un papel fundamental en la historia de una de las protagonistas, de Janis. El libro acaba con una cita de Eduardo Galeano impactante: “Por mucho que se la intente silenciar, la historia humana se niega a callarse la boca”. Una lectura diferente , y aunque no he visto la película, ahora, y a pesar de saber todo lo que ocurre, intentaré verla. + Leer más |
El retrato de Dorian Gray