Pablo Neruda
[...] la sonrisa triste de mis labios viejos. En las largas horas de mi amargo tedio, yo siento que brotas del triste silencio... Cómo te presiento, cómo te presiento! |
Pablo Neruda
[...] la sonrisa triste de mis labios viejos. En las largas horas de mi amargo tedio, yo siento que brotas del triste silencio... Cómo te presiento, cómo te presiento! |
Pablo Neruda
Pero el presentimiento! La infinita amargura de soñar con los goces de suprema dulzura que nunca en nuestra vida podremos poseer! |
Pablo Neruda
Llevo angustiada el alma y eternamente siento la marcha gris y lenta de la melancolía. Siempre de entre la bruma de los tiempos pasados renacen los recuerdos de los días más bellos, y yo que en la tristeza de un andar desolado [...] |
Pablo Neruda
Ahora voy andando con todo el alma llena de ilusiones perdidas, y el recuerdo se pierde en medio del cansancio, del hastío y la pena... |
Pablo Neruda
Y sentir que pasan los días y los días, con el prometimiento de sanas alegrías que algún lejano día sentiremos llegar. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
Mi alma no se contenta con haberla perdido. Como para acercarla mi mirada la busca. Mi corazón la busca, y ella no está conmigo. La misma noche que hace blanquear los mismos árboles. Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos. Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise. Mi voz buscaba el viento para tocar su oído. De otro. Será de otro. Como antes de mis besos. Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos. Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero. Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
Ella me quiso, a veces yo también la quería. Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos. Puedo escribir los versos más tristes esta noche. Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido. Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
Te ceñiste al dolor, te agarraste al deseo. Te tumbó la tristeza, todo en ti fue naufragio! |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
Ese fue mi destino y en él viajó mi anhelo, y en él cayó mi anhelo, todo en ti fue naufragio! Oh sentina de escombros, en ti todo caía, qué dolor no exprimiste, qué olas no te ahogaron. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
El que te llama desde las llanuras brotadas. Yo soy el que en la hora del amor te desea. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
Duérmete sobre mis dolores si mis dolores no te queman, amárrate a mis alas, acaso mis alas te llevan, endereza mis deseos, acaso te lastima su pelea. Tú eres lo único que tengo desde que perdí mi tristeza! Desgárrame como una espada o táctame como una antena! |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
Sed de ti que me acosa en las noches hambrientas. Trémula mano roja que hasta tu vida se alza. Ebria de sed, loca de sed, sed de selva en sequía. Sed de metal ardiendo, sed de raíces ávidas. Hacia dónde, en las tardes que no vayas tus ojos en viaje hacia mis ojos, esperándote entonces. Estás llena de todas las sombras que me acechan. Me sigues como siguen los astros a la noche. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
Me gustas cuando callas porque estás como ausente, y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca. Parece que los ojos se te hubieran volado y parece que un beso te cerrara la boca. Como todas las cosas están llenas de mi alma emerges de las cosas, llena del alma mía. Mariposa de sueño, te pareces a mi alma, y te pareces a la palabra melancolía. Me gustas cuando callas y estás como distante. Y estás como quejándote, mariposa en arrullo. Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza: déjame que me calle con el silencio tuyo. Déjame que te hable también con tu silencio claro como una lámpara, simple como un anillo. Eres como la noche, callada y constelada. Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo. Me gustas cuando callas porque estás como ausente. Distante y dolorosa como si hubieras muerto. Una palabra entonces, una sonrisa bastan. Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
Para mi corazón basta tu pecho, para tu libertad bastan mis alas. Desde mi boca llegará hasta el cielo lo que estaba dormido sobre tu alma. Es en ti ilusión de cada día. Llegas como el rocío a las corolas. Socavas el horizonte con tu ausencia. Eternamente en fuga como la ola. He dicho que cantabas en el viento como los pinos y como los mástiles. Como ellos eres alta y taciturna. Y entristeces de pronto, como un viaje. Acogedora como un viejo camino. Te pueblan ecos y voces nostálgicas. Yo desperté y a veces emigran y huyen pájaros que dormían en tu alma. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
En tus brazos se enredan las estrellas más altas. Tengo miedo. Perdóname no haber llegado antes. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
[...] yo solo quiero que me lleves! Allá estaré como aquí estoy: adonde vaya estaré siempre con el deseo de partir y con las manos en la frente... |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
El pueblo es gris y triste. Si estoy ausente pienso que la ausencia parece que lo acercara a mí. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
Era mi corazón un ala viva y turbia y pavorosa ala de anhelo. |
Poesía completa - Tomo I de Pablo Neruda
[...] vivo en tu vida, vives en mi vida, nada me has dado y todo te lo debo. |
Veinte poemas de amor y una canción desesperada de Pablo Neruda
Me gustas cuando callas porque estás como ausente, y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca. Parece que los ojos se te hubieran volado y parece que un beso te cerrara la boca. |
¿Cuál es el órgano que trasplantan a Cora?