Seamos tú y yo de Esther Mor
Lo que encontré me dejó con cara de imbécil redomada y una mala hostia de tres pares de cojones: ++++ a cuatro patas debajo de +++++ siendo empalada a fondo desde atrás a un ritmo frenético y animal. Gozando en la que estaba destinada a ser +++++++ ++++. Asco. Mucho asco
|