El camino imposible

«El camino imposible» de Manuel Álvarez-Xagó, es una novedad literaria de reciente publicación que ha llegado a nuestras librerías de la mano de Roca editorial. A quiénes tengo que agradecer el haber disfrutado de su lectura, para así poder compartir mis impresiones con todos los seguidores de stageandscreen.

Atendiendo a la historia de ficción que nos es narrada, os tengo que advertir que en su sinopsis es desvelada gran parte de la trama, por lo que os recomiendo que evitéis su lectura, siendo preferible que no sepáis de antemano más que lo que os voy a contar.

En una primera parte del libro, conoceremos a los personajes de Fulgencio Vallejo y Sofía Laude. Dos jóvenes promesas, que han unido sus vidas gracias a la medicina y al intenso amor que se profesan. Y a los que unos años después de su graduación, veremos regresar a España junto a su idílica familia, al frente de una investigación médica prometedora en la detección precoz del cáncer.

Llegados a un punto de la historia, veremos cómo Rómel, el perro integrante de la familia, tomará el protagonismo del libro. En primer lugar, sorprendiéndonos con sus increíbles capacidades olfativas en el seno de la investigación pionera que dirigen Fulgen y Sofía. Para después emocionarnos, acompañando a nuestro protagonista en una gran aventura en la que deberá enfrentarse a situaciones extremas, con el objetivo de lograr reunirse con su familia.

Una reparto de protagonismo intencionado, que evidencia las dos partes diferenciadas en este libro. Y con las que su autor rinde homenaje a aquellos que abren esos caminos imposibles a los ojos de los demás, como a estos peludos de cuatro patas que fielmente nos acompañan.

A pesar de que algunos de los hechos que se cuentan en esta novela no son agradables, llegando a abordar una realidad social tan incómoda como es el maltrato animal. «El camino imposible» es una novela emotiva, que supone un canto a la vida, al amor y a la esperanza. En el que la pasión por los animales y los beneficios inherentes a estos ocupan un lugar destacado. Poniendo el foco en un tema que es de actualidad, ligado a la importancia de estar a la vanguardia invirtiendo en ciencia y medicina con el fin de salvar más vidas.

Como apasionada de los animales, en particular de estos angelitos de cuatro patas con los que tengo la gran suerte de compartir mi vida desde mi niñez; tengo que reconocer que he llegado a empatizar con Rómel con una gran facilidad. Derramando alguna que otra lágrima, así como alguna que otra sonrisa al reconocer aquellos gestos inequívocos a los que estoy tan acostumbrada. No obstante, es un libro que está escrito de tal modo, que facilita enormemente el que seáis capaces de dejaros llevar por sus pensamientos y emociones. Y con un final tan emotivo, que os provocará una explosión de emociones difícil de controlar.

En definitiva, es una historia preciosa con la que he disfrutado de principio a fin, motivo por el que os animo con su lectura. Resultándome especialmente interesante aquella parte en la que su autor, aborda a través de una historia de ficción, aquellas investigaciones pioneras que sentaron las bases de las actuales líneas de investigación contra el cáncer. Así como no he podido evitar emocionarme a más no poder, con el personaje de Rómel, un perro grande y amoroso creado a partir del recuerdo entrañable de uno de los perros que marcaron la vida de su autor.

Fulgencio y Sofía son dos estudiantes españoles que coinciden estudiando en la Facultad de Medicina de Harvard. Ella viene de una buena familia lo que le ha permitido estudiar en una de las universidades más prestigiosas del mundo. El, en cambio, está ahí gracias a una beca. Ella es la chica más guapa de la universidad. Él cree que no tiene ninguna oportunidad pero se enamoran, se casan y empiezan a trabajar como científicos. En Estados Unidos forman su pequeña familia: ellos dos y un cachorro que encuentran abandonado y al que ponen de nombre Rommel. Familia que al poco se ampliará con el nacimiento de los dos melizos

Años después, la familia al completo se traslada a vivir a España donde se les ofrece la posibilidad de investigar un tratamiento pionero contra el cáncer. Fulgencio lleva tiempo fijándose en Rommel, su perro: un perro inteligentísimo y dotado de un instinto espectacular que le sorprende continuamente con sus habilidades. Y empieza a elucubrar con la posibilidad de entrenarle para que su fino olfato detecte el cáncer en un estadio tan inicial de la enfermedad que ni siquiera los adelantos tecnológicos pueden hacerlo.

Pero cuando todo va viento en popa y la investigación recibe el beneplácito de la comunidad científica y de los medios, un accidente de coche en Asturias acaba con la vida del matrimonio y el niño. Sólo sobreviven la niña, Sofía, y Rommel. Desgraciadamente, las circunstancias separan a ambos: Sofía va a Madrid con sus abuelos maternos y Rommel, muy malherido, será cuidado por un pastor de la zona. El instinto de Rommel hace que, una vez recuperado, tenga que ir a buscar a su familia, a su Sofía. Así inicia un largo camino, un camino imposible.

Os parecerá que os he contado demasiado de la historia de esta novela y así es; pero no he desvelado nada que no diga la sinopsis que, sinceramente, creo que es demasiado extensa. No es este un libro de intriga en el que haya que guardarse un as en la manga pero es cierto que la sinopsis cuenta casi todo. Aún así, aunque sepamos de antemano qué va a pasar y qué tiene que hacer Rommel para reunirse con lo que queda de su familia, leer sobre el proceso, sobre el camino, ha sido para mí un auténtico placer.

Adoro los animales y, sobre todo, los perros y me encantan las novelas protagonizadas por estos seres tan especiales. Por eso, esta novela se hizo un hueco en mi corazón en cuanto Rommel apareció en escena. También os digo que es con las novelas que más sufro (junto a las protagonizadas por niños) así que, cuando a Rommel le pasan cosas, lo he pasado un poco mal, no os lo voy a negar. Es una novela que me ha hecho llorar: a veces de dolor pero al final de emoción. Y es que el final, no por menos esperado, me ha resultado tan bonito y emocionante que se me ha caído la baba.

No es una novela en la que haya grandes misterios porque el lector ya sabe desde que ocurre l accidente qué necesita Sofía para recuperarse y ya nos imaginamos lo que va a pasar. Y pasa, claro: pero es que tiene que ser así, de otra manera no hubiese sido el libro que es. Aunque el camino que emprende Rommel se tilda en el título de imposible, ya sabemos por experiencia que no lo es en absoluto, que caso similares se han dado: perros perdidos o abandonados que han andado kilómetros y kilómetros hasta encontrar a su familia. Los perros son increíbles y los humanos no somos conscientes de todo lo que su instinto puede hacer.

Me ha encantado cuando el narrador se pone en el lugar del perro y nos cuenta lo que siente y “piensa”. Yo tengo perro y me parece muy acertado todo lo que dice. Es evidente que el autor también tiene o ha tenido perro y que sabe perfectamente cómo se comportan y actúan nuestros queridos bichitos. Creo que es una novela que puede gustar a muchos lectores pero que gustará especialmente a los que, como yo, nos consideramos amantes de los perros.

Me ha dado pena que el autor no profundizase en el trabajo de Rommel. No podía hacerlo por razones obvias ya que la historia iba por otro camino pero era un tema muy interesante que a mí me estaba gustando mucho. Pero sí que es verdad que, cuando ocurre el accidente y todo se concentra más en Rommel, es cuando más me ha gustado la novela. La primera mitad más o menos, se centra en la vida de Fulgen y Sofía y la segunda mitad es la que transcurre desde el accidente. Ese ansía por sobrevivir de Rommel, esa búsqueda de la pequeña Sofía, a mí me ha encantado.

Conclusión final

“El camino imposible” es una emotiva novela sobre el poder del instinto y del amor de un perro por su familia. Una novela triste y esperanzadora llena de emoción.

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Hoy sale a la venta «El camino imposible» de Manuel Álvarez-Xagó editado por Roca. Una novela que he tenido la oportunidad de leer antes de su publicación y de la que os voy a contar mis impresiones.

En «El camino imposible» conoceremos a Sofía una joven que pertenece a una familia adinerada y que ha podido estudiar en una de las universidades más prestigiosas del mundo. de esta forma consigue seguir los pasos de su padre en el campo de la Medicina. Allí coincidirá con Fulgencio, un joven de familia austera que ha conseguido realizar sus estudios gracias a una de las becas más difíciles de conseguir obtenida por su gran trabajo, esfuerzo e inteligencia. Ambos se enamoran y deciden formar una familia en EEUU donde viven. de esta forma empiezan a trabajar en el campo de la investigación al mismo tiempo que llegan a sus vidas los mellizos Sofía y Pelayo, dos niños alegres y despiertos que juegan junto a Rómel un cachorro que sus padres rescataron entre un montón de cajas. Este perro será no solo un miembro más de la familia sino el trampolín para hacer un vital descubrimiento en el campo científico.

No quiero contaros mucho más de esta historia y os aconsejo que no leáis la sinopsis, para mí en esta ocasión hace verdaderos spoilers de la trama y me hubiera gustado ir descubriendo lo que pasa sin saberlo de antemano.

«El camino imposible» ha sido una novela tierna de esas en las que sufres leyendo pero que también disfrutas y por eso se lee con el corazón encogido, pero queriendo avanzar para saber realmente cual va a ser el devenir de nuestros personajes. Todo es idílico en la familia Vallejo-Laude hasta que algo rompe esa felicidad y cambia por completo sus vidas. En ese momento Rómel se convierte en el absoluto protagonista de esta historia y las situaciones a las que se tiene que enfrentar mantendrá al lector en una situación de alerta constante. Supongo que para los que tengan perros o sean amantes de los animales esta parte del libro les duela y les guste a partes iguales, entiendan el sufrimiento y “el pensamiento” de este perro que el autor nos transmite, en mi caso que no tengo animales me ha costado un poco más empatizar con él, pero es cierto que hay momentos en que sientes y padeces todo lo que el pobre Rómel tiene que pasar.

La primera parte del libro sirve para conocer a los miembros de la familia y lo que para mí es más importante de esta historia que es la investigación que Fulgencio quiere llevar a cabo con Rómel: aprovechar la capacidad olfativa de los perros que ya sabemos que es muy sensible para buscar partículas cancerosas en humanos. Algo que en principio yo desconocía y que tras la lectura del libro he indagado y he descubierto que se están haciendo estudios para preparar a perros y que detecten diferentes tipos de cáncer gracias a sus millones de receptores olfativos.

En definitiva, «El camino imposible» es una historia que me ha gustado pero que creo que hubiese sido más interesante si hubiese profundizado más en la parte de investigación que para mí es la más atractiva de esta novela pero os la recomiendo porque seguro que os gusta conocer a esta familia y en especial a Rómel y su periplo andando ese camino que se antojaba imposible pero que gracias a su lealtad y sobre todo a su instinto consigue vencer todos los obstáculos que va encontrando.
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Una historia bonita y tierna narrada con sencillez y naturalidad en la que nos encontramos con dos partes bien diferenciadas. En la primera de ellas conoceremos a los jóvenes estudiantes Fulgencio y Sofía, viviremos como entablan amistad primero y como se enamoran y forman una familia después. Es un interludio alegre, divertido y despreocupado que desemboca en la segunda parte de la trama, tal vez más dramática y triste pero con un poso de esperanza y emoción en todo su recorrido. En esta segunda mitad, la historia se reparte entre el proceso de recuperación de la pequeña Sofía y los esfuerzos de sus abuelos por devolverla al mundo real ya que la niña parece vivir anestesiada por el dolor y no expresa sus sentimientos, ni siquiera es capaz de pronunciar palabra y los avatares de Rómel, el perro de la familia, en su recorrido interminable y muy peligroso entre Asturias y Madrid.
¿Legará Rómel a cumplir su cometido y logrará salvar a la pequeña Sofía de la oscuridad y el ostracismo en el que está sumida?
En conjunto, la historia resulta bastante realista. En primer término, los estudios científicos-médicos sobre la detección precoz del cáncer a través del olfato de los perros existen aunque aún están en fase de desarrollo, pruebas y aceptación total por parte de la comunidad médica. Por otro lado, creo que todos hemos oído alguna vez el caso de un perro perdido o abandonado que viaja kilómetros hasta dar de nuevo con su dueño. El autor combina estos dos asuntos y arma una trama en la que el protagonista absoluto es Rómel. Me ha gustado especialmente cómo el autor logra que un narrador en tercera persona me haya hecho sentir que en realidad era el propio perro el que narraba su aventura, sus percepciones, sus anhelos e incluso sus sentimientos llegan con todo su poder emocional al lector. La mayoría sabéis que me aterran los perros, por eso veo más meritorio que Manuel Álvarez-Xagó haya conseguido emocionarme de una manera que no esperaba.
Una buena ambientación redondea la historia en la que apreciaremos la belleza de los parajes montañosos asturianos pero también tendremos muy presente una sensación de peligro angustioso para Rómel que pasará en su periplo por situaciones verdaderamente escalofriantes.
En cuanto a los personajes, es indudable que Rómel es el protagonista absoluto. Padeceremos por él, querremos ayudarle y viviremos con emoción todo su viaje.

CONCLUSIÓN
"El camino imposible" de Manuel Álvarez-Xagó es una historia hermosa y emotiva en la que un perro hará lo imposible por retornar al lado de sus dueños, conmovedora y vibrante nos demuestra, una vez más, la fidelidad y la bondad de un animal de familia, ójala los seres humanos también fuéramos siempre así.
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