Ninguna perdida es permanente porque nada es permanente, jamás.
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Ninguna perdida es permanente porque nada es permanente, jamás.
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La gente decía «te quiero» mucho más a la ligera, sin sentir tanto, y no significaba nada. Y quizá esa era la clave.
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[…] todo se podía arreglar si te tomabas el tiempo de averiguar qué estaba roto.
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-No olvides esto nunca, mine Sadie: la vida es muy larga, a menos que no lo sea.
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La vida está llena de encrucijadas morales ineludibles. Debemos hacer lo posible para evitar las que son fáciles de solventar.
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Diseñar un videojuego es imaginarse a la persona que acabará jugándolo.
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¿Con qué frase empieza esta novela?