Macabea04 May 2021
Te levantas de la cama y es la guerra Suena el teléfono. Manolo. Me comunica que le han dejado un ojo como un plato. En una fiesta; cosas que ocurren, me dice, cuando uno se divierte. Algo que, como ya se sabe, no le gusta demasiado a la mayoría de la gente. Que si salgo, me pregunta. Estoy trabajando. Escribo este poema, fumo, escucho a la vecina, que otra vez se ha puesto en pie de guerra con el crío, la merienda, los tebeos, la leche. Pienso que no me importaría nada ser el personaje de ese libro que hay sobre la mesa. Podría al menos conocer New York, coger el metro, disparar la Browning, romper todos los dedos de las manos a aquellos que más odio. Le digo que no puedo. Me atenazan el alquiler, las moscas, el verano, la ciudad, la gente, los semáforos. Pero que si quiere puede pasarse por mi casa. Bajaré a por unas latas, hay tabaco. Charlaremos. + Lire la suite |