Lady Hotspur

Cuando se anunció este libro en la Quedada del 2020 quedé enamorado con la portada y, aunque es una secuela de Las reinas de Innis Lear, se anunció como un libro que puede leerse de forma independiente a ese, así que me lo apunté porque amé Extraña gracia y este prometía ser otro libro con mucha diversidad.

Después de la rebelión dirigida por su madre, Hal ahora es la príncipe de Aremoria, dejando de lado su papel como protectora de la antigua príncipe Bana Mora. Aunque Mora sigue con vida, perdió aquello para lo que estaba destinada ser, la reina de Aremoria y, tiempo después, regresa a Innis Lear para planear su venganza y recuperar su trono. Lady Hotspur es conocida como el lobo de Aremoria, la mejor guerrera de todos. y parte fundamental de la rebelión. Durante las celebraciones del nuevo gobierno, un hechicero de Innis Lear cuenta una profecía donde el dragón arderá, el león se derrumbará y el león decidirá al final; y aunque en Aremoria no se cree en las profecías, Hal, Mora y Hotspur saben que se refieren a ellas y su futuro: tres amigas, dos reinos, una profecía, ¿alguien saldrá victoriosa?

Tengo que admitir que la primera vez que leí la sinopsis de este libro me hice una idea complemente errónea de lo que iba la historia y no fue hasta que empecé a leerlo que supe por dónde iba realmente la cosa, así que espero que esta que hice sea lo suficientemente clara para que no se confundan como me pasó a mí, jsjs. Y si ya leyeron el primer libro se podrán dar cuenta que tiene vibes similares, que el conflicto central es quién se quedará con la corona, solo que en esta ocasión no son hermanas las que pelean por ella, sino dos mejores amigas impulsadas por un asunto político de rebelión y orgullo: Hal es fiel a su madre y sabe que esa corona le corresponde después de tantos años en el exilio y tras el reinado inestable de un rey inútil; por su parte, Bana Mora toda su vida ha crecido sabiendo que gobernará Aremoria y sabe que, aunque el rey no es lo mejor que le ha pasado al reino, no merecía morir como lo hizo y ella no merece ser tratada como alguien sin valor, esa corona es de ella por derecho. Tengo que admitir que el hecho de que dos amigas cercanas peleen por una corona, con las historias de fondo de ellas dos, me fascina y se pone aún mejor porque el conflicto de reinar Aremoria se empieza a pintar con toques de fantasía provenientes de Innis Lear, el reino que se separó hace cientos de años y que consigo se llevó toda la magia. Así que básicamente esto es una historia con una lucha por un reino, donde la fantasía hará de las suyas y las profecías, una vez más, marcarán el camino a seguir.

Como en el libro anterior, los personajes juegan un papel importantísimo en la historia y todos tienen una construcción increíble y cada uno aporta de manera diferente a la trama, obviamente tengo a mis favoritos y por los que daría todo.
Hal Bolinbroke, la nueva heredera de Aremoria. de las tres protagonistas es mi favorita, sin duda es la que mayor crecimiento tiene a lo largo de la historia y la que más humana se siente. La vida de Hal antes de la rebelión de su madre se basó en proteger a la heredera, siendo la líder de las Damas de Armas (un grupo de guerreras que juraron lealtad a la heredera) y Hal estaba conforme con esto, con ser una guerrera y vivir para defender a su amiga. Cuando el peso de la rebelión recae en ella, debe decidir entre su amiga o su madre, y claro que elige a su madre, la apoya conspirando contra el rey y liderando la rebelión; para cuando salen victoriosos, Hal se convierte en príncipe y los deberes de este son tantos que decide irse por el lado fácil, fiestas, alcohol, sexo y excentricidades, formando su propia corte (de desgobierno) a modo de escape donde las formalidades salen sobrando y donde se siente cómoda, donde puede ser ella misma. Hal empezó siendo de los personajes que ni odiaba ni quería, pero conforme avanzaban sus capítulos y veía sus acciones (casi todas erróneas o incorrectas a los ojos de los demás y que demanda su posición como heredera, haciendo que más que quererla, fuera detestable) más la entendía, más podía empatizar con sus miedos, anhelos, sueños y solo quería darle un abracito y que fuera feliz. Y nada, es mi favorita por el crecimiento que tiene: paulatino, con tropiezos y un montón de decisiones difíciles a las que se enfrenta y lo hace de la manera más madura posible, y lo duro que fue su camino para que ella misma pudiera entender la importancia de su existencia en esta historia.
Banna Mora, antigua heredera de Aremoria. Con ella tengo todo un tema, empezó siendo mi favorita porque carga con el papel de princesa relegada a segundo plano, reducida a cero y a la que fue despojada su grandeza y cuando, por azares de la vida, llega a Innis Lear encuentra su destino: vengarse por el robo de su trono y ser el mejor rey que ambos reinos han conocido. Amaba que su trama se dirigiera a Innis Lear y estuviera llena de la magia del lugar, pero llega un momento en el que Mora se obsesiona con el trono que perdió y se vuelve un personaje iracundo, egoísta y rencoroso, llegando al punto de exigir lealtades a quienes no se la deben. Siento que su desarrollo como antagonista no fue bueno porque pierde todas buenas cualidades que tenía al iniciar y la evolución de su trama junto con sus decisiones y actitudes no terminaron de convencerme del todo, entendí que quisiera su trono de vuelta y que aprovechara el apoyo que otros le brindaron (claro que es comprensible), pero hubo un montón de cosas que hizo que no iban, al menos desde mi punto de vista, con su personalidad y forma de ser.
Isarna Hotspur, la guerrera que da nombre al libro. Supongo que es la protagonista (por algo el libro lleva su nombre :v), pero nunca pude conectar con ella, me parece un personaje indeciso y que nunca quiere tomar parte en nada, solo se deja llevar por la corriente y por lo que otros le dicen, nunca tiene una opinión formada y, a pesar de que su destino le grita que está hecha para grandes cosas, Hotspur solo quiere estar alejada de todo lo que la ponga en conflicto. No noté un crecimiento en ella y me molestó que el peso de la trama recayera en ella (la profecía dice que el lobo decidirá y ella es el lobo de Aremoria, una de las mejores guerreras de todo el reino) porque los demás personajes la enaltecían y le daban la importancia que ella no se daba (o merecía :p), es un personaje bastante plano que no ofrece mucho porque es débil y falta de carácter.

Tenemos un montón de secundarios, pero hay algunos que se roban más el corazón que otros (y que claramente tienen más peso en la historia).
Rowan, sobrino de la reina Solas y príncipe heredero de Innis Lear. En un inicio lo amé y se robó mi corazón porque se siente cercano a Innis Lear en el aspecto de que respeta a la isla, sabe su papel como sucesor de la corona y honra el significado de ser el próximo rey (ya fue elegido por la isla como su gobernante, el agua de raíz evitó que fuera envenenado por la cicuta, ritual que todo rey o reina de Innis Lear debe realizar para probar que son dignos de la corona), pero pronto se ve cegado por su egoísmo y ganas de que su destino sea superior al de los demás: se obsesiona con las profecías estelares y busca cumplirlas a toda costa, incluso si eso significa traicionar a quienes confían en él y quienes más quiere.
Connley Errigal, hermano de Banna Mora. Es hechicero de la isla de Innis Lear y sin dudas es de mis favoritos por la cercanía que tiene con la isla, tiene un comportamiento ermitaño y no típico de alguien de su posición. Me encanta que no se sienta atado a ninguna convención, que sepa que su lugar está en el Bosque Blanco y con lo salvaje: los árboles, el aire y la tierra. No fui tan fan de cómo su trama se ve envuelta en asuntos políticos porque Conn no sabe decir que no, es muy blando para enfrentar conflictos y deja que los demás hagan con él lo que quieran. Es muy puro, lo quiero mucho y solo merece lo mejor en el mundo.
Charm del tercer reino. de él no quiero dar mucha información porque su participación se revela hasta pasada la mitad del libro (si no mal recuerdo) y el papel que juega es importantísimo en el aspecto político que conlleva gobernar un pueblo. Dejando de lado lo anterior, me encantó la inclusión de alguien del tercer reino que tanto se menciona y del que nunca hemos sabido nada, excepto que Dalat viene de ahí y que tienen una forma distinta de gobernar: un matriarcado donde la magia y profecías no influyen en lo más mínimo. Fue divertido notar todos los contrastes entre reinos a través de él, un personaje que se siente fresco y con una claridad que nadie posee, tiene un objetivo y, aunque planea cumplirlo, no está cegado por sus propias ambiciones y sabe cuándo es pertinente estar. Un personaje secundario acertado y agradable.

Esta segunda parte deja de sentirse tan apegada a la fantasía épica y apuesta por explotar la magia que hay en ambos reinos, sobre todo la de Innis Lear. A pesar de que nuestro conflicto se sitúa en Aremoria, la isla tiene un papel importante en lo que pasará ahí porque las profecías demandan que así sea. Fui muy fan que, a cien años de los sucesos del primer libro, las cosas en esta isla hayan cambiado tanto, que se encuentre en su mayor esplendor y la magia corre libremente por todos lados, sin miedo de ser nombrada o descubierta. Y amé que se explorara el pasado trágico mágico de Aremoria, cómo fue despojada de la magia y lo que esto significó para ambos sitios: santos terrenales, fantasmas, tierras sufriendo y un montón de aspectos míticos que deben de ser descubiertos. Sin dudas la parte de la fantasía, su construcción tal pulcra y con un montón de elementos que no ves venir es lo que te mantiene pegado al libro y evita que lo abandones, Tessa Gratton hace que te sientas cercano a la historia de ambos reinos y termines queriéndolos, porque no son un simple terreno, son los protagonistas que exigen una trama, son una historia, sus habitantes, todos los que estuvieron y los que estarán, es tragedia, pero también es amor y unidad. de verdad me encariñé con Innis Lear, es una isla que ha sufrido, que ha sobrevivido y que brinda lo mejor de ella.

De nuevo la parte negativa es la narrativa, es sumamente densa, lenta, repetitiva y escenas que se sienten extra o de relleno, de hecho, hay un momento antes de que el plot final explote en el que tenemos poco más de cien páginas de relleno con un sinsentido de eventos que solo te ponen en tensión y hacen desear un poco de acción. Siento que la autora quiso darnos una historia tan compleja y completa que tropezó en la creación de la voz de cada personaje y hubo ocasiones en las que me perdía y no sabía quién narraba el capítulo porque, al todos los personajes ser narrados en tercera persona, se sienten impersonales y no logras encontrarles una voz propia.

Me siento bastante decepcionado porque durante dos terceras partes (apróx) estaba amando el libro, tenía todos los elementos necesarios para ser una gran historia: una trama con personajes bien construidos, traiciones, lealtades fluctuantes, juegos políticos, romances apasionados, decepciones amorosas, magia regada por todos lados, profecías de lo más misteriosas que podrían significar mil cosas y al mismo tiempo nada y un par de reinos necesitados. Pero llega un punto donde la historia necesita, grita por explotar y tomar un rumbo caótico casi destructivo, pero la autora decide alargarla de forma innecesaria y resolverla de una manera bastante simple, rara y conveniente.

Me parece sumamente arriesgado que, sobre todo en España, este libro, al ser una secuela, se publicara sin tener la primera parte. Aunque no parece necesario haber leído el primer libro, siento que sí afecta bastante el no haberlo hecho, hay referencias del final y flashbacks de lo que sucede después, spoileándolo todo, sobre todo con Elia, Morimaros y un par de personajes más. al leer Las reinas de Innis Lear siento que pude conectar con todas las referencias que se iban dejando e ir hilando lo que significaba las cosas a las que se referían y que se presentaban como incógnitas para los protagonistas, igual no hay que espantarse porque se explica el cómo los sucesos pasados tienen importancia en el presente, pero de una forma impersonal (como debe ser), a través de leyendas, cuentos y rumores. Si me lo preguntan, recomiendo leerlos en orden porque la historia (sobre todo de la isla de Innis Lear) tendrá más sentido y significado, si no desean hacerlo, no hay problema, pero se les escaparán esos detalles que le dan un montón de significado a las referencias del pasado (yo me la pasé increíble reconociendo a personajes, fangirleando sobre su destino y reencontrándome con ellos).

En resumen, Lady Hotspur, es una fantasía excelentemente bien construida, con un mundo basto, lleno de magia y profecías que exigen todo lo que los personajes principales puedan dar, pero que pierde el impacto al tener una narrativa densa y dispersa. Sin dudas es un mundo al que quiero regresar y estaría encantado en leer un spin off donde se cuente por completo la historia de la separación de Innis Lear y Aremoria.