Este libro lo empecé a leer allá del 2019 cuando fue novedad en español y, tras medio año de lectura y 360 págs leídas, lo abandoné porque no lograba conectar con la historia, los personajes, ni el mundo. Finalmente, tras casi dos años de tenerlo abandonado, decidí darle una segunda oportunidad porque sentía su mirada acusatoria de "me abandonaste" y porque se publicaría en español la secuela, Lady Hotspur y me llamaba bastante la atención, jaja. Innis Lear es un reino que ha sido despojado de su magia y que cada día se hace más y más débil, volviéndose un blanco para otras naciones. Pero esto no le importa a Lear, un rey que ha perdido la razón y solo confía en lo que las estrellas le dicen y es por esto que en la noche más larga del año nombrará, de entre sus tres hijas, a su sucesora. Gaela, la mayor, está segura que heredará la corona de Innis Lear, pues cuenta con el apoyo de su hermana Regan y Elia, la menor, no representa una amenaza porque es una simple sacerdotisa sin ambiciones. Pero muchas cosas pueden pasar hasta que llegue la noche en que las profecías se cumplan e Innis Lear no solo tendrá que enfrentar a los enemigos externos, sino sus conflictos internos. Tengo que admitir que suena a la típica trama de fantasía donde hay conflicto para heredar el trono porque lo es, lo que lo diferencia es que las hermanas herederas no son enemigas, pero tampoco son unidas, simplemente saben de la existencia de la otra y deciden ignorarse mientras no se interpongan en sus planes, sobre todo por parte de la dupla que forman Gaela y Regan hacia Elia. Lo bueno de la trama viene con la historia familiar ya que es bastante complicada: las estrellas le dieron a Lear una profecía donde encontraría a su esposa y en la misma le dijeron cómo la perdería y una vez cumplida la profecía, Lear no pudo recomponerse de esa pérdida, descuidó a sus hijas e hizo diferencias entre ellas, prefiriendo a Elia por ser la más parecida físicamente a su madre, haciendo que la relación entre las hermanas se rompiera. Han pasado diez años de la muerte de Dalat, Lear está en su peor momento y la isla comienza a fracturarse resintiendo la falta de magia, las hermanas saben que la isla necesita una nueva reina y están dispuestas a restaurar el daño provocado por su padre. Así que nuestra trama gira en torno a las tres hermanas, la corona y su relación con Innis Lear, una isla que tiene más vida de lo que puede ser posible. Claramente es un libro que apuesta mucho a sus personajes y tenemos una infinidad de ellos que aportan a la trama, así que intentaré hablar de todos ellos muy resumidamente, iniciando por las hermanas Lear. Gaela, la hermana mayor. El propósito de su vida es ser la próxima rey de la isla e imponer su voluntad. Gaela es la que más desprecia a su padre y por lo mismo ha buscado mantenerse alejada de él, es una guerrera sin igual y aún mejor estratega (cae en el cliché de mujer guerrera fría, sin sentimientos, que racionaliza todo y que deja de lado su vida amorosa, pero le da un poco la vuelta al ser ambiciosa, no ser servicial y querer con la vida a su hermana Regan). Sabe sus responsabilidades como heredera de la corona y, aunque está casada, no tendrá hijos, esa responsabilidad se la deja a su hermana Regan. No es mi favorita de las hermanas, pero sí la disfruté muchísimo porque tiene una furia permanente en su ser que usa para cumplir sus objetivos, es aguerrida, fuerte, pero también está ciega y sedienta de poder, al grado de no confiar ni en su propia familia (Elia). Regan, la hermana de en medio. Mi personaje favorito del libro. Siente el peso de la responsabilidad de tener que engendrar un hijo heredero para que, cuando Gaela se rey, su legado no corra peligro. Su trama gira en torno al problema que representa no poder lograr que ninguno de sus embarazos logre pasar más allá de un par de semanas sin sufrir un aborto espontáneo, por lo que ha hecho de todo para lograr ser fértil, incluso ha acudido a la magia de la isla y el agua de raíz, la que su padre prohibió que se utilizara. Regan me parece un personaje muy puro, inteligente, sentimental y fuerte, pero llega un momento en que las cosas se ponen muy duras para ella y yo solo quería abrazarla. En serio es un personaje que vale mucho la pena, y se ganó aún más mi corazón porque es con quien creamos un vínculo cercano con la magia prohibida. Ah, y está casada con Connley, otro pancito del cielo, este matrimonio se merece todo en el universo. Elia, la hermana menor. de mis personajes menos favoritos en general. al ser la hermana menor y la que mayor parecido tiene con la madre, se convierte en la favorita de su padre y ella por darle gusto se hace sacerdotisa, dedicando su vida a estudiar las estrellas, sus profecías y viviendo, básicamente, para complacer al rey. Elia es una falta de ambición y visión, no tiene personalidad propia y solo llega a involucrarse en el conflicto que representa la sucesión de la corona cuando es absolutamente necesario y, aún así, es muy lamentable su actuación (de hecho si la tengo que comparar con alguien sería con Sansa, de GoT, solo que Elia no tiene una arco de crecimiento y redención tan espectacular, sino que es bastante regular). Lo que más coraje me da es que es la que mayor protagonismo tiene y de la que más capítulos leemos, por lo que su crecimiento es más evidente y construido. De los personajes que no son Lear hay mucho que contar porque algunos tienen tanto protagonismo como las hermanas Lear y todos aportan a la trama, y dejaré a algunos de lado porque esto sería infinito, pero unos de los más remarcables son Brona, la bruja del bosque blanco (ténganla en mente, la amarán) y Rory Errigal, un pancito puro del cielo. Ban El Zorro. Un hijo ilegítimo que tuvo que salir al mundo a ganarse un nombre y la vida, ya que en Innis Lear sería un simple bastardo que genera lástima y en Aremonia logró convertirse en la mano derecha del rey, siendo uno de los hombres más respetables en cualquier lugar. Con Ban tengo un problema de gustarme-no gustarme, y es que en un principio me encantaba que tuviera vibras salvajes, que no escondiera su naturaleza mágica que lo une a la tierra, que fuera humilde y orgulloso al mismo tiempo y que fuera devoto al rey, pero cuando pisa Innis Lear deja de gustarme y se vuelve un personaje simple, que está atado al pasado y que su naturaleza de hijo ilegítimo le pesa, finalmente recupera mi cariño porque con él vivimos íntimamente la magia. Morimaros de Aremonia. El rey de Aremoria, el reino del que Innis Lear se desprendió hace mil años. El propósito de Morimaros es unir Innis Lear con Aremoria, sin importar el costo que se tenga pagar, pues esto lo haría pasar a la historia como el mejor rey de todos (ego de vato estúpido), y descubre que la mejor manera de ganar esta guerra es de forma política, ganándose a Elia y convenciéndola de que aplique su derecho al trono. Si tuviera que elegir un personaje menos favorito sería él, lo siento como el típico vato que se las da de santo, pero a la primera de cambio no dudará en atacarte si no coincides con él, además, no lo considero un personaje estable y fluctúa mucho con sus intereses políticos, personales y sentimentales, así que por mucho tiempo no estuve seguro de cómo sentirme al respecto con él (terminé con un balance no tan negativo, solo me molesta su presencia y ya ;p). Lo que más disfruté fue la construcción del mundo y el sistema de magia, el hecho de que la isla de Innis Lear constituya en sí un personaje me fascinó, pues a lo largo de los capítulos vemos cómo la isla se comunica con diferentes personajes a través del viento, los árboles o la tierra, así como el hecho de que aquí los reyes no se eligen tanto basándose en el linaje o el rango que poseas, sino en un ritual que exige la propia isla: debes comer cicuta, una planta venenosa, y posteriormente tomar agua de raíz, que es como la esencia de la isla, si no mueres eres apto para gobernar porque la isla confía en ti. Intenso, pero fascinante. Además tiene su propia historia sobre cómo se hizo reino independiente, por qué las cosas funcionan diferente ahí y la razón por la que Aremoria quiere reunificar ambas tierras, y yo lo disfruté en cada palabra (ni las clases de historia en la escuela eran tan interesantes). Y pasando al sistema de magia, pfff, lo único que puedo decir es que me encantó, de verdad cada que alguien hacía algo mágico yo estaba living, sobre todo porque la magia está prohibida y al emplearse se siente salvaje y necesitada, obviamente requiere un balance y esta no es accesible para todos porque proviene de la misma isla... Finalmente, y de pasada, las profecías estelares son tan importantes como cualquier otro personaje, pues por ellas todo se desarrolla y la verdad es que no fui tan fan de esto, no le encuentro mucho sentido a que los personajes se dejen influenciar por lo que alguien dice que es su destino, las profecías son súper ambiguas y en lugar de esclarecer las cosas, solo logran confundir más y de ahí vienen todos los errores y problemas de la trama. El gran problema del libro es la narrativa, es sumamente densa, repetitiva y descriptiva, le sobran cerca de doscientas páginas de cosas que innecesarias porque tenemos múltiples puntos de vista y con cada personaje se nos describen castillos, tierras, vestidos y el sentir de cada uno respecto a lo mismo o acciones que no tienen relevancia a la historia. Hay muchísimas cosas rescatables en la historia, pero la forma de escribir de Tessa es para querer dormirte, además de que te abruma con estrategias, política y planes muy técnicos. Tengo que reconocer que hay ocasiones en los que esto resulta beneficioso, por ejemplo, las escenas de acción son increíbles, o cuando te ves envuelto en magia y puedes llegar a oler y sentir la brisa con la que Ban habla. Algo que me hizo regresar a este libro fue que Lady Hostpur se anunció con un montón de personajes diversos y en la tercera parte que llevaba leída recordaba haber sentido atisbos de diversidad, así que cuando decidí terminarlo quedé algo decepcionado de que esto solo se queda en algo tímido, casi como subtexto y que tienes que andar adivinándolo, ¿por qué? A menos que la autora diga otra cosa, para mi hay un personaje trans asexual y dos bisexuales... además se deja ver, según yo, muy claramente un triángulo amoroso muy intenso donde todos quieren con todos, pero solo "profesan" amor hacia una parte (la heterosexual). Por fa, si ya leyeron el libro confirmen mis sospechas, jaja. Una pequeña advertencia: la editorial cometió un grave error al vender este libro como fantasía juvenil, definitivamente no lo es, empezando por nuestros protagonistas, todos tienen más de 18 años y actúan como corresponde a su edad, además de que la creación del mundo es sumamente compleja y la trama tiene bastantes toques políticos y hay muchos tintes de fantasía épica (escenas de batalla, entrenamientos, tácticas, alianzas y traiciones, etc.), así que yo lo catalogaría como fantasía adulta por su complejidad y bastedad de tramas, traiciones, enredos, elementos y giros argumentales. En resumen, Las reinas de Innis Lear, es una historia de fantasía muy bien estructurada, con un buen desarrollo de personajes y trama, pero que abusa de las descripciones y alarga innecesariamente una trama. Una historia que ofrece una trama muy política, con acción suficiente y la intriga de la traición típica de las sucesiones de reales, todo con un toque de fantasía y magia diferente que harán que la lectura no caiga en los mismos clichés del género. Sin dudas me quedo con bastantes ganas de leer Lady Hotspur, sobre todo porque se desarrolla cerca de cien años después de los acontecimientos de este libro y quiero saber cómo afectaron las acciones de nuestros personajes a los futuros gobernantes. + Leer más |