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Reseña en IG @angela.lectoravoraz 4,35 En esta segunda parte Spensa logra lo que tanto había soñado y esforzado por conseguir con un empeño que le llevó a vivir situaciones al límite. Pero sigue sin entender muchas cosas de si misma, al mismo tiempo, que siente una amenaza que se cierne sobre ella y que despierta el pánico entre su gente. Ahora debe afrontar otra misión casi suicida para averiguar cómo sobrevivir a ese otro enemigo al que tanto tiempo llevan combatiendo. Tenía muchas ganas de leer la continuación de Escuadrón, por lo mucho que lo disfruté, fue de mis mejores lecturas del año pasado. En este libro la trama cambia por completo. Se expande mucho más el worldbuilding, y tienen mucho protagonismo los juegos políticos y de poder. Vemos a una Spensa más madura, sigue siendo una imprudente, pero eso es lo que la hace tan especial. Meterse en situaciones donde nadie más sería capaz de meterse y salir airosa por los pelos. Es toda una heroína. Me gusta que se vea una progresión en los personajes a lo largo de los libros, y este también ha sido el caso, pero he de reconocer que me gustó más la Spensa de Escuadrón. Era ella contra el mundo, tenía que demostrar su valía, hacer justicia, y eso me encantó. En esta segunda parte vemos como ya no es tan impulsiva y aprende a trabajar en equipo. El worldbuilding se expande, y hubo ocasiones en las que me costó un poco comprender la magnitud de todo lo que estaba sucediendo, pero es cierto que no estoy acostumbrada a leer ciencia ficción, y quizás también haya sido eso. Aún así, al final, lo acabé comprendiendo. El ritmo me ha parecido entretenido; esperaba que me tuviera igual de enganchada que Escuadrón, pero no ha sido así. No llega a hacerse aburrido ni pesado, pero tenía unas expectativas un poco mayores. Principalmente, fue por toda la trama política y los juegos de poder que, aunque siempre me suelen gustar este tipo de tramas, no ha sido el caso. Fue la parte central del libro donde se me hizo algo más lento, el final fue donde si que no pude parar de leer. Aún así me duró cuatro días. Lo recomiendo si te gustan: las historias de ciencia-ficción, con una protagonista de armas tomar, los worldbuilding algo complejos que se van expandiendo y para una lectura que por momentos engancha, pero que en general entretiene. |
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