No te puedes fiarte de nadie
|
No te puedes fiarte de nadie
|
Cuando acabó de limpiar la piel y de extender una capa de sal habían pasado varias horas. Era de noche, debía volver a casa.
|
Todavía recordaba con nostalgia aquellos primeros trabajos que realizaba con pieles de pequeños roedores cuando tan solo era un niño. Todo era mucho más sencillo en aquellos lejanos tiempos, puesto que su mayor preocupación era conseguir unos buenos acabados y merendar cuando tocaba.
|
¿Qué medida tomó el profesor Snape para proteger la Piedra Filosofal?