El vizconde que me amó

Este libro es el segundo de la serie de los Bridgerton, una serie romántica de época que trara de una familia, siendo cada libro de un hermano o hermana. Se podrían leer por separado perfectamente, aunque a veces mencionan que ha sido de los anteriores, lo cual sería spoiler si no fuera porque...bueno, que el final feliz está cantado. Pero aunque eso podría resultar predecible, voy a romper una lanza por la autora: cada libro es un cliché diferente. Y eso me gusta, porque cada hace cada lectura única. Y un buen recorrido por el género romántico. Dos en uno.
En este tenemos el típico: No me quiero enamorar así que me voy a por la guapa tonta (aunque no es para nada tonta) pero se me cruza su hermana borde y fea (aunque no es fea) y saltan chispas. Creo que es de mis clichés favoritos, aunque me hubiera gustado más borderio. Pero estamos a principios del siglo XIX así que... precisamente por eso, los hombres me resultan a veces muy pegables, con tanto "Es que soy un hombre y me tienes que obedecer" y "es que soy un hombre y soy más listo" "Es que soy un hombre..." Pues mira chato, a veces me pareces una planta con esos razonamientos finos.
Pero quitando eso que no deja de ser una actitud histórica que tanto nos chirría ahora (gracias feminismo! Que nos sirva de recuerdo adonde no queremos volver ) lo cierto es que lo he disfrutado un montón: me he reído y me he emocionado y me lo he leído en un pis pas. Julia Quinn tiene además una forma de escribir muy ágil que hace que la lectura sea aún más ligera.
Si queréis un libro ideal para un enganche de verano, os lo recomiendo un montón. Y si queréis una serie ligera, pues también la tenéis en Netflix.