Ésta es la segunda novela que leo de Claudia Piñeiro, la primera fue "Catedrales" y me causó muy buena impresión. Me gusta mucho cómo escribe y cómo ahonda en los sentimientos de sus personajes y en la realidad que les ha tocado vivir y padecer. Es un relato corto, de 200 páginas, que leí casi de un tirón en una tarde, que me atrapó y y no me soltó hasta que llegué a la última página. Elena ha padecido la muerte de su hija Rita en extrañas circunstancias. Rita apareció colgada del campanario de la iglesia que frecuentaba; la investigación llevada a cabo se da por cerrada, pero Elena no se queda conforme con la versión oficial del suicidio como causa de la muerte y busca esclarecer el crimen y encontrar al culpable. Elena sabe... pero necesita saber más y busca la verdad, pero su cuerpo ya no es suyo y no le responde. Padece un estadio muy avanzado de Párkinson que apenas la deja moverse y necesita la ayuda de otro cuerpo que investigue por ella la muerte de su hija... En esa búsqueda Elena analiza su vida y la de su hija buscando la verdad, una verdad a la que llegará poco a poco a medida que sabe más... Reseña escrita en mayo de 2021 |