Hábitos mínimos: Pequeños cambios que lo transforman todo

Siempre estamos intentando ordenar nuestras rutinas, mejorar algunos aspectos de nuestra vida como no morderse las uñas, por ejemplo.

Por lo general pocas veces llegamos a cumplirlo porque la fuerza de voluntad no nos dura mucho tiempo. Quien no ha intentado comer más sano o ir al gimnasio. Empezamos con fuerza y ganas pero nos duran un tiempo. Después siempre surge algo que es más importante.

Todos conocemos algo sobre los hábitos de oídas o por haber intentado cambiarlos. Hay muchos libros y métodos a nuestro alcance. Y pensareis que este es uno más. Si es uno de todos esos pero con la peculiaridad de que no solo da explicaciones y pasos a seguir sino que con poco esfuerzo ya ves resultados.

Como bien nos cuenta el autor hay tres elementos que deben estar presentes. Estos son: motivación, habilidad y un detonante.

Una vez que decidimos crear un cambio positivo para nuestra vida, hay que lograr buscar el enfoque adecuado para conseguirlo. Y si no lo hacemos, no es nuestra culpa. Es que necesitamos variar el enfoque. El autor nos cuenta que es la forma adecuada de enfrentarse a los hábitos nuevos que queremos incorporar.

Lo primero y primordial es ser realista con nuestros deseos. Después, ponerse en movimiento y aprender sobre la marcha. Y, sobre todo, divertirse durante todo el trayecto. Los habituadores, como les gusta llamar el Dr. Fogg a sus seguidores, deben aprender a ser flexibles y no estresarse.

La motivación es muy importante pero no es lo único a tener en cuenta. Nuestro cerebro siempre busca lo más placentero. Por eso cuando una acción o habito le resulta poco agradable, intenta no llevarlo a cabo. Debemos lograr hacer creer a nuestro cerebro que debe ejecutarlo y hacerlo costumbre hasta automatizarlo. Diréis que fácil decirlo pero que difícil lograrlo. Para ello tenemos el método del los hábitos mínimos. Empezando por partes muy pequeñas lograremos llegar a lo grande. Esto es el método de hábitos mínimos.

La técnica para conseguirlo tiene unos pasos a seguir, fáciles por ir avanzando siempre poco a poco. Aplicando estos pasos en todos los hábitos a conseguir iremos creando las rutinas. Con ellas se automatizan las acciones y se crea la actuación.

No se debe tener miedo aunque lo hayamos intentado algunas veces sin conseguirlo. Una vez se tiene la información y el conocimiento hay que actuar,

Actualmente, hay muchas ideas, programas, artículos e información para ordenar nuestras vidas y acondicionarlas al ritmo que lleva nuestro mundo. Pero no todas son realistas ni fáciles de incluir en nuestra rutina. al contrario, nos frustran por crearnos expectativas que no alcanzables.

Este método está apoyado en el modelo conductual. Es decir, no nacemos con hábitos, sino que son comportamientos que adoptamos e incorporamos a nuestra rutina por medio de aprendizaje. Son un proceso de mejora diaria, no un objetivo a cumplir.

Al cambiar despacio lo vamos aceptando sin darle importancia ni apoyarnos tanto en la fuerza de voluntad que es tan variable. Y por supuesto, la recompensa que nos va a fijar el comportamiento y va a dar al cerebro esa compensación o placer que busca.

El ejemplar de hábitos mínimos tiene un tamaño medio. Es muy manejable, cómodo de usar y claro en su distribución.

Cada capítulo tiene tras la introducción, unos ejemplos de situaciones y personas que han pasado lo mismo o parecido a lo que cualquiera de nosotros siente en algunos momentos. Si, esa sensación de ¿y ahora por donde voy?. Es motivador que otros hayan podido orientarse desde donde te encuentras o desde muy cerca.

Tras las explicaciones teóricas, vienen los deberes. Esos ejercicios que te van a dirigir hacia la meta. Hazte con tu libreta y un bolígrafo y a empezar la tarea.

Casi todo el libro está enfocado a hacerte trabajar en esos ejemplos fáciles que hay que aplicar a nuestra propia rutina. Con pasos pequeños vas enfilando el camino deseado.

He hecho muchos ejercicios y mi rutina esta variando. Sin prisa, pero si es verdad que hay momentos que quiero mas y eso me lanza. Aunque también hay días que me atranco. No importa porque paso al siguiente. No me castigo ni me penalizo. Todo lo contrario me felicito por volver de nuevo.

Estoy orgullosa de lo que estoy logrando. Es cuestión de empezar y poco a poco, acercarse a la meta.

Tengo mi libro lleno de posit y hojas con anotaciones para repasar si lo necesito. Como es un tomo fácil de llevar es como una guía.

Si quieres lograr tus metas sin tener que apoyarte en la fuerza de voluntad, este es tu libro. Muy aconsejable para dar pasos pequeños y conseguir grandes cosas.
Enlace: http://elrincondelharlequin...

Mis muchas obligaciones actuales me han generado pequeños desajustes en mi vida diaria que he tratado de corregir sin éxito. Rara vez cumplo los horarios que me marco, cada tarea que emprendo parece quitarle todo el tiempo a la siguiente. Todo esto me llevó a interesarme por uno de los últimos títulos publicados por Ediciones Urano. Me refiero a Hábitos mínimos. Pequeños cambios que lo transforman todo del científico y escritor norteamericano B. J. Fogg.

Fogg cuenta con una sólida formación y reputación forjado durante años en el Laboratorio de Diseño de la Conducta de la Universidad de Stanford. Asimismo, sus conocimientos sobre la conducta humana lo han convertido en imprescindible para los pesos pesados de Silicon Valley en el mundo de las redes sociales (uno de los cofundadores de Instagram fue alumno suyo).

La cuestión es que Fogg expone en su libro Hábitos mínimos que pequeños cambios en nuestras rutinas diarias, cambios casi imperceptibles, pueden permitirnos, sin grandes dosis de esfuerzo ni de energía, alcanzar aquellos objetivos que nos habíamos marcado y parecían difíciles de lograr. No se trata de tener una varita mágica, tan sólo de habituar a nuestro cerebro de forma rápida y sencilla a cambiar cosas de nuestro día a día que queremos cambiar y que se acaban convirtiendo en un trampolín para conseguir otros cambios más ambiciosos.

La propuesta de Fogg no es revolucionaria (en principio), pero sí da respuesta al mayor problema de nuestra sociedad actual: la falta de tiempo. Con Hábitos mínimos busca que, sin tener que invertir tiempo que no tenemos y sin frustrarnos echándonos la culpa por fracasar, apliquemos sus sencillas rutinas amoldadas a las nuestras.

Fogg expone sus amplios conocimientos en materia de conducta humana, nos relata los últimos descubrimientos científicos en este campo y nos alienta con ejemplos de otras personas que implementaron esos pequeños cambios pudiendo lograr más de los que pensaban. La única pega que podría ponerle al libro, es que está muy orientado al estilo de vida anglosajón. Sin embargo, una virtud que le encuentro como lectura, que está más enfocado como ensayo científico que como libro de autoayuda.

Hábitos mínimos de B. J. Fogg es una lectura que se sale de lo que suelo leer, pero que me ha otorgado algunas herramientas valiosas que estoy aplicando poco a poco. Además, desde el punto de vista científico, me ha resultado un libro muy instructivo e interesante. Una lectura sobre nuestras conductas e interacciones con el mundo actual en el que vivimos. ¡Mil gracias a Ediciones Urano por el ejemplar!
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