Valentina de mi vida

Nuestra novela de romántica contemporánea no empieza en el presente o al menos no exactamente. La obra cede su voz a Valentina, una muchacha normal y corriente, que nos contará su vida casi desde su concepción hasta esta escena del presente.
La autora consigue así que conozcamos a la protagonista desde un punto de vista más humano. La vida de Valentina será un porqué de su situación, de su forma de ser y de entender el mundo. En este relato, la autora nos incluirá temas de gran calado social como el bulliying, el maltrato, etcétera, temas que estarán contados desde la cercanía y la sencillez, pero también desde el respeto.
Lo particular en lo común
Lo cierto es que acercarse al personaje de Valentina es acercarse a una persona que ha pasado mucho, pero que tiene mucho que vivir. Simpática, amante de los libros, alegre y divertida a pesar de todo, de las dificultades, los tropiezos y la vida en general, es un personaje carismático también por lo que ha aprendido y por lo real que nos parece. Aquí Laura ha hecho, a mi parecer, un trabajo excelente de caracterización, no solo ya por Valentina sino por cada uno de los personajes que encontramos en la novela.
Además, como decíamos más arriba los temas que trata la novela, desde el punto de vista de Valentina, estarán muy bien desarrollados, ya que Valentina los contará como realidades que le han sucedido. Esto nos recuerda que, aunque parece que a ella le pasa todo, es más común de lo que pensamos, aunque no debiera serlo, y que la mejor manera de superarlo es asumir la realidad, salir de lo nocivo y seguir adelante.
Esas particularidades de Valentina son las nuestras e incluso cuando le pasa algo «de película» aún podemos creerlo. Porque estas cosas a veces sí que pasan.
Elenco y verbo
Los acompañantes en la historia de Valentina son todos únicos en algún aspecto. Lo que quiero decir es que aunque cada uno representaba su papel, tenía su función en la obra, la manera de actuar con los demás le confería de una personalidad muy interesante. Así tenemos a Amanda, la mejor amiga de Valentina desde siempre; a Víctor, su mejor amigo; pero también a los «antagonistas» de esta novela romántica, como Oliver.
A esto le acompaña el estilo de la autora que es muy ágil y directo. No nos desvela nada, pero tampoco se anda con rodeos; si sucede algo, sucede y punto. Nos duela, nos haga reír o llorar. Además, la autora consigue transmitirnos mucha cercanía, lo que les sucede a los personajes, los escenarios, sus reacciones, etc. son cosas que nos suceden cada día; no crea ese mundo ideal que a veces encontramos en la romántica donde nuestros personajes parecen tener el dinero ilimitado, no trabajan y casi no van al baño…
De mi vida
La verdad es que ha sido mi primer contacto con la autora y lo he disfrutado mucho. Me ha parecido que la historia es preciosa, casi perfecta por lo cercana y amena que me ha resultado. Ya no va solo en identificación plena, sino más bien en esa idea de la amiga que conoces o de lo que tú podrías hacer en su situación.
Por su parte, me han gustado también las lecciones de positividad y alegría que nos hace Valentina. A pesar de sus dramas vitales, que lo son, ella continúa con su vida, luchando por lo que quiere y dejándolo cuando se ha acabado, y seamos sinceros no todos somos capaces de hacer esto. Además, el humor no solo de nuestra protagonista sino también del resto de personajes hace que avancemos con ganas para seguir conociendo qué pasó y qué pasa.
No quiero decir mucho más porque me da miedo hacer spoiler, pero que creo que románticas de este modo, más cercanas, con temas interesantes más allá del «se lían o no se lían», me encantan. Ahora me voy a por el segundo libro, aunque en realidad se puede parar en este primero, pero ¿quién no querría saber más? Espero que os animéis con él.

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Cuando Laura Montalbán me dijo: "¿Aún no conoces mis Valentinas?"... Me quedé ojiplática pensando que estaba cometiendo un pecado por no haberlas leído todavía. Y es que ya tenía ganas de conocer a esta mozuela que ha resultado ser una auténtica delicia.

Primero y antes que nada agradecer a Laura la edición con esa letra amplia que a los cortos de vista nos va de perlas y no tenemos que sacar la esclerótica del ojo para leer.

Nos encontramos ante una trama cotidiana como la vida misma, y es que este libro nos narra las tribulaciones de una mujer como tú o como yo, con nuestros defectos y virtudes en la selva de asfalto. Una mujer que lucha por abrirse camino trabajando en una cafetería por las tardes y en una librería por las mañanas (qué reminiscencia más bonita del local de Koreander en La historia interminable). En estos ambientes es donde van a suceder muchos acontecimientos de su vida, de esa heroína anónima de barrio.

Los personajes son frescos y divertidos, apelando siempre a su normalidad, amigos de Valentina, jefes de Valentina, marido de Valentina, amor de Valentina y ella, Valentina, el centro, mujer carismática y de una fortaleza de ánimo que la va a ayudar a encajar los golpes que va a recibir en la vida.

La pluma de Laura es tan real y jovial que hasta las que somos mayores podemos vernos identificadas a su edad. Sin duda, amo el carácter de Valentina. Además hay que reconocer que la autora tiene gracia narrando, de modo que la lectura se hace ágil y muy agradable.
Ella seguramente se ha inspirado en su propia persona para crear a Valentina, pero es que yo me siento Valentina y cualquier mujer que lea este libro será Valentina.

Me ha gustado tanto compartir hasta el último recoveco de su intimidad que estoy deseando comenzar el segundo volumen y ver la evolución que ha tenido en él. Realmente es un libro muy entretenido y muy apropiado sobre todo para esta época vacacional donde apetece leer cosas ligeras y lúdicas. Se agradece, enhorabuena Laura.

Reseña en IG @angela.lectoravoraz

Esta es la historia de Valentina que nos va contando las piezas del puzzle que componen su vida, hasta que poco a poco ese puzzle se va completando, construyéndose a sí misma. Una chica amante de los libros, risueña, segura de sí misma (lo suyo le ha costado) con carácter y que va con paso firme por la vida, con una madre a la que adora y que lo ha dado todo por su hija a base de esfuerzo y sacrificio pero sobre con mucho amor, y unos amigos, a los que no cambiaría por nada del mundo. Por las mañanas trabaja en una librería, con el más que entrañable señor Andrés y por las tardes en la cafetería Brooklyn su segunda casa, y en cada libro que recomienda y cada café que prepara, pone todo su alma y corazón porque así es Valentina que tiene un corazón que no le cabe en el pecho.

La cantidad de mensajes que tiene este libro contado en forma de diario, te llegan a lo más hondo, como la importancia de querernos a nosotras mismas a pesar de esas imperfecciones que tanto nos empeñamos en ver, y que la sociedad en vez de ayudar, nos hace sentirnos menos. de lo difícil que es la addolecencia cuando no encajamos en los cánones que se nos imponen, lo importante que es que nos quieran bien, porque si el amor es muy bonito pero sólo cuando nos da alas en vez de cortarlas. de lo bonito que es el amor de una madre y el de tus amigos.

Que es lo más bonito que tiene este libro pues todo, su historia, su variedad de personajes de lo más entrañables que aportan al libro una magia, que hace que brille con luz propia. La pluma de la autora es ágil y bonita; las páginas pasan casi sin darte cuenta.

Lo recomiendo si te gustan los libros llenos de sentimientos, que al terminarlos sientes que una parte de ese libro ya se ha quedado contigo.

El libro al principio me costó por la temática, pero es algo totalmente objetivo y personal: no soporto la gordofobia y el bulling, me hace sufrir. Tantas cosas malas le pasaban a Valentina que empecé a pensar que no era un libro para mí, pero es justo éso lo que le hace un buen libro: se nota que la autora se ha documentado y te desgarra un poquito por dentro cada bache del camino.
Por otro lado el mundo que envuelve a Valentina, la cafetería, la librería son lugares que me gustaría visitar y sus personajes secundarios se hacen muy reales, son gente normal que puedes encontrarte en tu día a día.

Lo mejor del libro es la forma de escribir de la autora, es muy ágil y refrescante. Me encanta lo fácil de leer que ha hecho la novela. A veces incluso he tenido la sensación de estar leyendo un diario. Toca tantos temas que es complicado no sentirse identificado con alguno.

Primer libro que leo de la autora y me ha encantado. Está escrito de forma muy ágil, por lo que resulta muy rápido de leer. Es una historia muy completa, en la que se resalta el valor de la familia y la amistad, y con una protagonista que me ha encantado. Tiene algún que otro giro que no me esperaba y un final que me ha parecido muy bonito. Muy recomendable.