La novela transcurre desde los preparativos oficiales para la inauguración de los Juegos Olímpicos de México 68 hasta la matanza del Jueves de Corpus en 1971 y los finales trágicos de algunos de los líderes y represores del movimiento estudiantil. Pero no se detiene ahí. También se adentra en las discusiones y dilemas que estudiantes y gobierno tuvieron para resolver el conflicto, y nos presenta a las personas que sorprendentemente jamás advirtieron la magnitud y el significado de las protestas y que apoyaron, con su silencio, la brutal represión. Sólo una cosa queda en claro: el fantasma de estos sucesos nos persigue hasta nuestros días, convertido en la pregunta que atormenta a unos y otros: ¿quién es culpable de la Historia?
|