La casa veneciana

Cuando conoces a alguien de toda la vida y lo ves constantemente, dejas incluso de saber qué aspecto tiene esa persona.

Hay que estar con los seres queridos en los momentos difíciles.

Los fantasmas me dan mucho más miedo cuando los armarios están cerrados.

La desaparición de los ancianos puede provocar auténtica tristeza, pero al mismo tiempo es natural, el cierre del ciclo inevitable de la naturaleza. En cambio, la muerte repentina de una persona joven está reñida con cada fibra de nuestro ser.

Cuando te despides de un amigo, no lo lloras, pues en su ausencia tal vez veas con mayor claridad lo que más amas en él.

Tu amigo es la respuesta a tus necesidades. Es el campo que siembras con amor y cosechas con gratitud.