Palabras que nunca te dije

María Martínez siempre me deja hecha polvo con sus libros, y este no ha sido una excepción.
Sara vive con su marido y su hijo en Londres, ella es ama de casa y se conforma con la vida que lleva aunque en el fondo sabe que no es feliz, pero tiene miedo de hacer cualquier cosa que pueda perjudicar a su hijo.
Su amiga Cristina le pide como favor, que viaje a la Provenza para ultimar las obras en su chateau para poder abrirlo como hotel rural. Ese simple gesto pondrá el mundo de Sara patas arriba.
Los vecinos del pueblo francés recibirán a Sara con los brazos abiertos, pero también conocerá a un americano buenorro que en principio está de paso por el pueblo y que acabará ayudándola con las obras del chateau. Lo que sienten el uno por el otro es una chispa que cada día que pasen juntos se convertirá en todo un incendio, pero Sara está casada y siente que no puede dejarse llevar de esa manera. A pesar de que sabe que su matrimonio lleva años muerto y de que su marido le ha puesto los cuernos en varias ocasiones.
Este libro es el viaje de Sara, para volver a ser la Sara que dejó de ser tras su matrimonio. Y también es el viaje de Jayden (el americano buenorro) para sanar y aprender a amar.
Este libro me ha roto el corazón en dos momentos hacia el final. Me encanta como escribe María Martínez. Creo que solo me queda uno de sus libros por leer.