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Como todas las historias románticas de María, "Cruzando los límites" es, de principio a fin, maravillosa. No suelo leer novela romántica, pero las de María Martínez me han conquistado y sé que, cuando me apetece una lectura más fresca y ligera, no me va a fallar. Consigue meterte en la piel de Savannah, también en la de Caleb, un tipo duro que no lo ha tenido nada fácil en la vida, y enamorarte de cada situación, incluso de las más tensas y difíciles, discusiones, tiras y afloja, que te mantienen en alerta y en tensión sin poder parar de leer. No solo es una novela romántica, una relación apasionada entre una joven rica de 19 años y un chico pobre de 21, es mucho más, sobre todo cuando Caleb descubre que la muerte de su hermano Dylan no fue un accidente... ahí lo dejo. Totalmente adictiva y recomendable. |
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